La vida te da sorpresas
Así se podría titular esta carta, la mayor parte de Santa Lucía, estamos muy tristes con los últimos acontecimientos. No podemos entender cómo una persona que siempre tenía tiempo para ocuparse de más de uno de nosotros, sea por alguna enfermedad, conseguir una pensión, beca o trabajo etc., etc., no haya confiado en su familia o amigos si tenía problemas ¨vaya a saber cuales¨. A mi no me cabe en la cabeza lo que pasó, pero nunca le voy a dar la espalda, al contrario, trataré de ¨comprenderlo¨ y acompañar a su intachable familia a pasar este difícil momento como él lo haría por alguno de nosotros. Tanto la familia como los amigos estamos muy agradecidos por el apoyo brindado por todos sus vecinos o políticos amigos que están acompañando permanentemente a su familia, que no se borraron a pesar de que muchos ¨carroñeros¨ aprovechan esta situación para llevar agua a su molino. La política conseguirá otro candidato, el correo otro empleado, pero para su familia y amigos, seguirá siendo nuestro ¨querido Indio¨ Además, como seres humanos que somos, ninguno de nosotros estamos libres de cometer pecados. Susana, D.N.I: 10.330.887