La policía tras la huella de los dos asaltantes del ciber
Se cree que los sujetos podrían ser de otra ciudad y circulaban en un automóvil con la chapa patente tapada que está siendo rastreado. El sábado a la noche, armados con una escopeta de tipo casera, entraron y se llevaron las seis computadoras del ciber del Ctdor. Luis Capozzuca. “Tranquila, somos asaltantes, no violadores”, le dijeron a la empleada durante el robo.
El robo que sufrió el sábado a la noche el ciber ubicado en Salta y Oliveira Cézar tiene varias características que no pueden pasar desapercibidos.
En primer lugar, ocurrió en el centro de la ciudad y en un horario en que esa zona es muy concurrida durante un fin de semana.
En segundo lugar, los ladrones entraron a cara descubierta y con un arma adentro de una bolsa, sin importar la cantidad de gente que estaba dentro.
Pero por último, cargaron nada más ni nada menos que seis computadoras, que metieron en bolsas de residuos, y las subieron a un automóvil en el que se movilizaban. Y lo hicieron ante la mirada atónita de los clientes que estaban allí haciendo uso de esas mismas máquinas porque el local a esa hora, siempre está concurrido.
Este “trabajo” prolijo, lo hicieron ante el paso y quizá la mirada de muchos sampedrinos que tranquilamente circulaban por allí en ese momento sin descubrir lo que estaba ocurriendo.
Es que es ésta la sensación de los habitantes de San Pedro en los últimos meses: los robos no tienen horario, ni lógica, ni objetivo económico o social porque resultan víctimas cualquier persona o comercio, haya logrado buena recaudación o no ese día, tenga o no mercadería valiosa para llevar.
“No somos violadores”
Estela Magas, la esposa del Contador Luis Capozzuca, ambos propietarios del ciber Marnos relató detalles del asalto del que fueron víctimas este fin de semana.
Dijo que los ladrones, entraron tranquilamente al local llevando una bolsa en la mano como si fueran dos personas que deambulaban por el centro haciendo compras. Pero en esa bolsa, llevaban una escopeta de tipo recortada pero que los testigos manifiestan era diferente a las usuales por lo que se cree podría ser de fabricación casera. Se dirigieron a la empleada que estaba en el mostrador, y le dijeron que se quedara tranquila, que “esto era un asalto”, y que su objetivo era llevarse las máquinas.
Por las dudas, y hasta utilizando una ironía muy especial, le aclararon que ellos eran “sólo asaltantes y no violadores”.
Después, desconectaron todas las CPU en funcionamiento, las pusieron en bolsas de residuos, y las cargaron en un automóvil en el que habían llegado, que según los testigos “era un auto despintado con la patente tapada”, y que sería la pista principal sobre la que trabaja la policía para esclarecer el caso aunque por ese motivo desde la Comisaría se evitó brindar mayores detalles del vehículo.
Los ladrones también le sustrajeron al propio contador Capozzuca, la billetera personal en la que llevaba 90 pesos, y lo que resulta realmente llamativo es que cuando ingresaron se acercaron a la hija del propietario que tiene apenas 11 años, le dijeron que bajara la cabeza y que “no iba a pasar nada”. “El ciber estaba lleno a esa hora, se dirigieron a ella porque sabía que era mi hija”, explicó angustiada la propietaria, quien no evitó aclarar que la sustracción de las máquinas significan una pérdida muy importante para su familia. “Me dejaron sin poder trabajar”, sintetizó.