La mortandad de abejas como advertencia por el uso de agrotóxicos
Miles de colmenas perdidas despertaron el alerta respecto de la pulverización indiscriminada en los campos de la región. Investigaciones recientes dan cuenta de que San Pedro está entre las zonas donde predominan cultivos que utilizan más cantidad de agroquímicos y de mayor toxicidad. La falta de controles y la normativa difícil de hacer cumplir son parte del problema. Estudios revelan que los agrotóxicos afectan la leche materna y las verduras, y que guardan relación con diversas enfermedades.
Productores apícolas advirtieron la semana pasada a La Opinión que por tercer año consecutivo sufrieron la mortandad de abejas de manera insospechada y despertaron una alerta que el Inta buscará confirmar en los próximos días: el uso indiscriminado de agrotóxicos, que podría tener relación directa con esas muertes.
Los apicultores hablaron de unas 1300 colmenas perdidas, que cuantificaron en alrededor de 5 millones de pesos que el sector no movilizará esta temporada en la economía local.
El jueves pasado, en la sede de Inta, resolvieron convocar a una reunión con el Municipio a los productores frutícolas, en cuyos campos los apícolas tienen sus colmenas, en procura de alcanzar entre las partes un punto de entendimiento que no genere más roces entre ellos, que en alguna instancia se necesitan mutuamente.
Los apicultores carecen de normativa que los ampare y la pulverización con agroquímicos está permitida en determinados períodos del año. Aun así, uno de los problemas es que el tema no sólo pasa por la fumigación de las producciones frutícolas sino por lo que sucede en los campos linderos, donde predomina la soja, como en el 75 por ciento de la superficie cultivada local.
Una zona complicada
Una investigación de la Universidad de La Plata, bajo el título “Relevamiento de la utilización de Agroquímicos en la provincia de Buenos Aires” y desarrollado por investigadores de la Facultad de
Ciencias Agrarias y Forestales a pedido de la Defensoría del Pueblo bonaerense, reveló aspectos muy interesantes del uso de agrotóxicos en todo el territorio provincial.
San Pedro está en el segundo subgrupo de cantidad de hectáreas sembradas con soja, que ubica superficies de entre 40 mil y 80 mil. Es el distrito con mayor superficie de duraznos y naranjas de la provincia, con amplia ventaja sobre el resto. Lo mismo de ciruelas, mandarinas, damascos y pomelos aunque con superficies menores.
En base a la útima resolución de Senasa al respecto, Inta San Pedro recomienda el uso de algunos agroquímicos y no otros. Metamidofos y Metil azinfo son lo que están en la “banda roja”, junto a metiocarb, clorpirifos, endosulfan, metidation y metomil. Muchos de ellos fueron nombrados en la reunión de Inta del jueves, que este semanario presenció.
El informe señala que las actividades agropecuarias, por su cobertura territorial, tienen una gran influencia en la problemática ambiental provincial. La aplicación contínua de insecticidas “sin atender los umbrales de daño ecológico” determina un recambio permanente de productos menos tóxicos y persistentes por otros de amplio espectro, altamente tóxicos con gran impacto ambiental, como el caso del Endosulfán, señala y advierte.
En San Pedro, como parte de las regiones donde predominan cultivos que utilizan más cantidad de agroquímicos y de mayor toxicidad, el impacto potencial es mayor.
La liberación de agroquímcios se observa sobre todo desde agosto a mediados de octubre, cuando se aplica el barbecho químico (con herbicida) en el cultivo de soja.
Mira a tu alrededor
Una ordenanza local sancionada en 2006 regula la fumigación con agroquímicos. Además de establecer que quien fumigue para sí o para terceros debe estar inscripto en la Dirección de Sanidad del Ministerio de Asuntos Agrarios provincial, dispone además una restricción de 300 metros de los límites urbanos y las localidades, así como de las escuelas en la zona rural. Para las fumigaciones aéreas, la restricción es de mil metros.
Cualquiera que recorra el partido de San Pedro puede notar a simple vista que no se cumple. La escuela de Vuelta de Obligado tiene un campo de soja cercano; la de paraje Rolfo también -sobre esto hay fotografías que forman parte del informe del Consejo Consultivo-; lo mismo pasa en la de La Bolsa, donde hay colmenas afectadas; y la del paraje La Colorada; entre otras.
Los controles, como puede apreciarse fallan. Son muchos los organismos que deberían participar: Senasa, Asuntos Agrarios, Opds, Ejecutivo municipal…
El ambientalista Enrique Sierra fue claro respecto de lo que implica la alarma encendida por la mortandad de abejas: “Los bichos te indican antes de que las personas sean afectadas, esto es una advertencia del estado del ambiente. En San Pedro hay lugares donde ni siquiera se ven pájaros, es terrorífico”.
La importancia para la salud
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ratificó estudios independientes que advierten sobre la elevada toxicidad del glifosato y declaró al producto como cancerígeno para animales de laboratorio y “probablemente cancerígeno” en humanos.
El informe de la UNLP citado en esta página da cuentas de que los investigadores hallaron en suelo, aire y agua del territorio bonaerense gran cantidad y variedad de productos químicos, muy por encima de los parámetros “aceptables”. En Saladillo comprobaron que los agrotóxicos afectaron la leche materna.
Otra investigación de la misma Universidad analizó muestras de frutas y verduras en verdulerías platenses. El 76,6 por ciento tenía al menos un químico y el 27,7 por ciento de las muestras tenía entre tres y cinco agroquímicos. “La variedad de plaguicidas es muy grande. Y el cóctel de químicos es muy fuerte”, aseveró Damián Marino, codirector del trabajo, y añadió que entre los productos que más se detectaron está el insecticida “endosulfán”. Los alimentos analizados contenían los insecticidas lambdacialotrina, endosulfán, clorpirifos y cipermetrina. Y los fungicidas (para hongos) tebuconazole, tpoxiconazol. “Éstos son los amigos del famoso herbicida glifosato”, destacó Marino al presentar su trabajo en el Congreso de Salud Socioambiental de la Facultad de Ciencias Médicas de Rosario.
El vuelo del moscardón
Hay al menos un caso en isla Los Lobos de colmenas afectadas por fumigación con avión que pulveriza sobre plantaciones de soja. El apicultor había pedido que fumiguen de noche o de madrugada pero como tuvieron problemas mecánicos fueron a la una de la tarde. “Fue un desastre”, dijo el apicultor.
Un tirón de orejas para Senasa
La Auditoría General de la Nación advirtió en un informe sobre el tema y apuntó al Senasa como “el organismo nacional que registra y autoriza los principios activos y productos agroquímicos utilizados en la actividad agropecuaria”, los que clasifica “según su toxicidad”. Es además el encargado de llevar registros de las empresas productoras y aplicadoras. El informe señala que la contaminación por agroquímicos termina siendo una intoxicación silenciosa porque la exposición repetida y a largo plazo produce daños y/o muerte. “Se le han otorgado atribuciones que no puede cumplir adecuadamente” dice sobre la “ deficiente actuación del Senasa”, que, indica, “no fue por falta de normas sino por falta de cumplimiento”.