La lluvia anegó otra vez las calles y le echan la culpa a la basura
La gran cantidad de agua caída durante la última tormenta puso en debate nuevamente la situación de muchos sectores de la ciudad, que se ven inundadas cada vez que llueve. Desde el Corralón municipal sostienen que la basura obstruye los desagües y los vecinos manifestaron su enojo.
El jueves llovió y, una vez más, la ciudad amaneció con calles anegadas. Los barrios La Esperanza, Villa Lolita, Los Aromos, Villa Igoillo y otros sufrieron la situación. Despertaron nuevamente la queja de los vecinos, que dejaron registro en los muros de Facebook de La Opinión y La Radio, mientras el personal municipal dispuso tares especiales para intentar solucionarlo.
Desde el Corralón municipal, el Director de Servicios Públicos Angel Alvarez sostuvo que había gran cantidad de basura que obstruía los desagües, zanjas y cunetas. Aseguró que hallaron botellas de plástico, ramas arrojadas tras las podas ilegales y hasta una cubierta de auto, encontrada en el desagüe ubicado a metros de Crucero General Belgrano y Ruta 1001.
Hubo que utilizar dos retroexcavadoras y tres cuadrillas para localizar los sectores taponados y desobstruir lo que hiciera falta. Lo cierto es que la situación se repite cada vez que llueve y siempre en los mismos lugares.
Pellegrini, Salta y 25 de Mayo desde la altura del 1800 en adelante son lugares que siempre sufren anegamientos. La Ruta 1001, en su tramo de calle Juan B. Justo entre Almafuerte y Pelllegrini era un verdadero arroyo.
Lo mismo sucedió en Bozzano y Miguel Porta, o en el barrio San Miguel, en Ruffa y Manuel Iglesias.
Defensa Civil mantuvo una reunión para analizar las consecuencias del temporal, especialmente para revisar lo sucedido en los barrios donde las lluvias de agosto provocaron anegamientos importantes y evacuados, y lo que sucedía en La Tosquera.
La ruta como un río
Como si fuera poco, la Rua 191 también generó preocupación en el tramo que atraviesa Pueblo Doyle, desde donde un camionero envió una foto a La Opinión en la que pudo verse a otro camión que transportaba automóviles cero kilómetro que había quedado encajado en la banquina, con media carrocería bajo el agua.
El Delegado de Santa Lucía Martín Rodríguez señaló el viernes a la mañana que había “15 centímetros por arriba de la ruta” a la altura del kilómetro 28, por lo que tuvo que advertir a la población y pedir especial precaución para circular.
El agua provenía del Río Arrecifes y de los campos linderos que, como dijo Rodríguez, “no quieren más agua” luego de la gran cantidad de lluvia que cayó durante el último mes.
El Palacio municipal también
El flamante Secretario Legislativo del Concejo Deliberante Adrián Macenet tuvo que mudarse de su lugar habitual de trabajo y continuar con las tareas cotidianas de ese cuerpo en otra ala del edificio por la cantidad de agua que ingresó al lugar.
La Presidencia y el pasillo principal del HCD también sufrieron las consecuencias de la lluvia del jueves por la noche y viernes por la madrugada.
De la misma manera, en el ala donde el Ejecutivo tiene dispuesta la oficina de la Subsecretaría de Recursos Humanos quedó inundada y analizaban los daños que pudieran haberse registrado.
Desde el municipio reconocieron que al Palacio le falta mantenimiento y que cada vez que llueve la situación se torna peor, aunque aseguraron que procurarán realizar una reparación integral de los techos o aunque más no sea revisar las grietas más importantes para evitar complicaciones en el corto plazo.