La Justicia pidió “evitar la paranoia” tras los mensajes de la “combi blanca”
El fin de semana se viralizó un audio que advertía la presencia de un vehículo que secuestraba niños para “vender los órganos”. Aunque suele ser una constante la falta de precisiones geográficas, la voz de una mujer ratificaba: “Está pasando cerca, está pasando en Baradero”. En la vecina localidad Fiscalía inició una causa de oficio y recomendó “no entrar en la paranoia”.
La combi blanca sin patente que secuestra niños para venta de órganos o jóvenes para trata de blancas se ha transformado en una leyenda urbana que cada tanto renace. Sucedió el fin de semana en San Pedro y Baradero, con la viralización de un audio de WhatsApp.
Luego la Justicia intentó poner paños fríos al asunto, inició una causa de oficio en Baradero, a raíz del temor de unas estudiantes que dijeron ver un vehículo de esas características en actitud sospechosa, y planteó la necesidad de que la población no entre en pánico ante relatos que resultan verosímiles pero que se repiten, desde hace décadas, sin que haya casos comprobados.
Un audio escalofriante
“Recién estuve hablando con mi papá, fue la policía a alertarlo, fueron al hospital y a la clínica, a alertar que cuiden a los chicos porque anda una Trafic blanca que los está levantando para vender los órganos”.
“Supuestamente un hecho trascendió, no sé si en estos días, en la escuela Industrial, que quisieron levantar a dos chicas, pero salieron corriendo y zafaron”, decía la voz de la mujer, que insistía en que no se trataba de una “cadena”, ya que habría sido un policía quien relató la situación a su padre, que se desempeña en Seguridad, para advertirle que si ve un vehículo blanco o “de color sospecho” alerte enseguida a la fuerza.
Además, la mujer llega a aportar otro dato escalofriante: “El mismo policía le contó que en Pérez Millán estaban haciendo un control, y pararon una Trafic y cuando se están acercando al conductor agarra un arma y se pega un tiro en la sien. Y cuando abren la Trafic atrás tenían a cuatro chicos, niños, sin los órganos. Así que está pasando cerca, está pasando en Baradero”.
La conmoción fue alimentada en publicaciones compartidas cientos de veces con la foto de una niña presuntamente secuestrada en el partido de Merlo y los relatos de vecinos que contaban alarmados la situación.
“Yo no entendía nada, el padre está desesperado, la nena gritó y vio cómo se la llevaban, no tenía auto para seguirlos. Recemos por que la encuentren por favor”, dice otros de los audios que se difundieron sin parar.
La Justicia aclara
“Es el mismo mensaje que cada tanto reaparece y la gente se pone paranoica”, dijo a La Opinión el Fiscal de Baradero Hernán Granda, que inició una causa de oficio por el tema.
Hace unos años, desde el Registro Nacional de Personas Menores Extraviadas aseguraron que “es una mentira absoluta. No existe ningún caso real. Es una leyenda urbana que alimentan aquellos que fogonean el pánico”.
“Hay una causa de oficio por averiguación de ilícito. Lo de Pérez Millán es mentira, no es jurisdicción mía, pero no me consta”, dijo Granda sobre los presuntos mutilados a los que se refiere uno de los audios.
“Lo que hay son dos chicas que se asustaron porque vieron una combi blanca”, explicó el Fiscal y agregó: “Yo estuve en San Nicolás el fin de semana, y era el comentario allá también. Parece que está en todos lados la camioneta”.
Falsos secuestradores en San Pedro
En noviembre del año pasado, a través de Facebook y WhatsApp, una inmensa cantidad de vecinos de nuestra ciudad compartieron las fotos de cuatro hombres que habían sido vistos en varios barrios “vendiendo bolsas de consorcio y medias”, aunque la advertencia era que en realidad se trataba de secuestradores de niños que se manejaban en vehículos de alta gama, o a veces “una Trafic blanca”.
Sin embargo, la paranoia que llevó a varios a dar aviso a las autoridades policiales terminó cuando se supo que los rostros correspondían a ciudadanos de nacionalidad colombiana presos en México.
Las fotos también habían circulado en varias provincias del país y ciudades del conurbano bonaerense, siempre con características particulares que se adosan para justificar la alarma.
“Obviamente, cuiden a los chicos, pero no entren en la paranoia de comprar cadenas de WhatsApp que andan dando vueltas”, recomendó Granda.