La esquina de los pájaros
La presencia de secreciones y excreciones pertenecientes a las bandadas de golondrinas y tordos en pleno centro genera desagrado entre los vecinos. Un profesional asegura que es tóxico.
La permanencia de golondrinas y tordos en el cordón urbano que dibuja la Avenida 3 de Febrero en pleno centro de la ciudad, vuelve a enfrentar opiniones y generar acciones. Diariamente los árboles del radio que comprende al citado boulevard entre las calles Mitre y Salta, es el lugar elegido por estas aves. La bella escenografía natural que brinda el vuelo durante las tardes, para los vecinos, se ha transformado en un desagradable panorama sin solución. Así comienza la queja referida al mal olor o simplemente porque afean la vía pública.
Las aves como cualquier otro animal eliminan sus desechos: secreciones y excreciones. Para el caso particular de los gorriones, golondrinas y tordos, las fecas y orinas se dispersan en áreas donde se agrupan las bandadas. Dicha acumulación y aparición de malos olores seguramente tiene relación con la época de apareamiento y/o migración de las citadas aves.
No todas las veredas son higienizadas por los vecinos o comerciantes, pues hay sectores deshabitados. Eso ha llevado a que con el paso del tiempo se haya ido acumulando el guano, que, ayudado por la época y las altas temperaturas hace prácticamente imposible la convivencia.
Algunos vecinos reclaman que sean las propias cuadrillas municipales las que se encarguen de la limpieza, pues esto sucede en plena vía pública y en el centro de la ciudad, quitándole belleza a esas esquinas tan tradicionales.
Tanto quienes pasan caminando por allí como los conductores de vehículos que detienen su marcha en los semáforos lo pueden advertir inmediatamente, pero en este caso son los vecinos quienes han mostrado su preocupación y desencanto ante un panorama tan desagradable.
“Eliminan desechos tóxicos”
(Por: Dr. Alejandro García- Médico Veterinario MP: 10.098)
A través de la orina se eliminan desechos tóxicos entre los que se encuentran la urea: sustancia muy soluble en el agua (por esto se elimina por la orina), cristalizable, inodora e incolora. Está en el ambiente por acción de microbios se transforma en amoníaco que es un gas, de olor desagradable (referido por los vecinos afectados) y muy irritante. Las fecas, por otro lado, aportan también lo suyo con compuestos volátiles desagradables y contaminantes. Si bien no se discute que debemos convivir con estos seres, sería muy atinada la acción de su remoción diaria de nuestras aceras durante las épocas que duran sus visitas y/o su reproducción.