Las montañas de arena crecen y la actividad aumenta a un ritmo que los vecinos consideran incesante. Sobre el Bajo Cementerio y sobre todo en la rotonda, después de la creciente hay muchos nuevos asentamientos.
Frente a ellos despliega la actividad la empresa arenera que recibe varias barcazas diarias y a los camiones que desplazarán luego su carga con el peso que debe ser controlado por las autoridades municipales y la balanza de ruta 9 que hasta el momento no ha podido explicar algunas cuestiones que ya están preguntando quienes manejan la actividad.
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