La abuela Ester, los niños y el barrio
Eugenia fue la encargada de la invitación y escribió: “Ester… el año pasado cumplió su sueño de devolver un poco de todo lo que le ha brindado su barrio durante años haciendo de manera humilde una fiesta para los niños del barrio El Caserito. Ella es la promotora y nosotras hijas y sobrinas no pudimos negarnos a ayudarla así fue que el año pasado compartimos jugos, chocolate, música y torta con 200 chicos… todo logrado a fuerza de pulmón pidiendo donaciones y recaudando con pequeñas rifas. La abuela Ester, como la llamamos todos, vivió siempre en el mismo barrio con un comercio que ha sido el sostén durante toda su vida por eso está tan agradecida y este año nuevamente realizaremos la fiesta”. Una tarea extraordinaria de una mujer que se destaca por su solidaridad.
El multitudinario encuentro fue en la esquina de Las Provincias y Aulí, pasaron por el escenario el gimnasio de Tamara Pettone, el gym Najla Safi, Miguel y La Urband, entre otros. Las tortas de repostería combinada fueron elaboradas por Gisella Trezzini, quien además de compartir tareas en el negocio se dedica a fiestas y cumpleaños con sus productos.
El escenario fue emplazado por su proveedor de gaseosas y la decoración estuvo a cargo del titular de una vinoteca de la ciudad. Los premios fueron donados y el resto, solidaridad, ganas y organización sin otros fines que “devolver al barrio alegría”.