Junior Solmi, sobre su debut en el TC: “Antes de subirme al auto estaba con el pie ‘medio loco'”
El joven piloto dialogó con La Opinión tras competir el domingo por primera vez en el Turismo de Carretera (TC) como invitado de Matías Jalaf (Ford) en los 1000 kilómetros de Buenos Aires y contó sensaciones y pormenores de su labor: "El auto es un poco diferente a lo que es el TC Pista Mouras (N. de R.: TCPM, categoría en la que participa). Fue soñado, venía girando y peleando contra pilotos como Matías Rossi y no desentonaba. Las expectativas del equipo eran llegar en el top 10 pero se nos rompió la caja y la arreglaron con un gran trabajo en nueve vueltas".
Ya más tranquilo y lejos de las vorágine que vivió el fin de semana, Junior Solmi dialogó con La Opinión sobre su casual debut en el Turismo de Carretera (TC) como invitado de Matías Jalaf en la segunda edición de los 1000 kilómetros de Buenos Aires que se desarrollaron en el autódromo Oscar y Juan Gálvez en el marco de la novena fecha del campeonato que lleva adelante la Asociación Corredores de Turismo de Carretera (ACTC).
"No asimilé en ningún momento pasar de un momento a otro a tener que subirme al auto", reconoció el sampedrino quien contó que estaba "tomando mates" y un integrante del equipo de Jalaf le preguntó si quería "correr" porque Aldo Ortíz se accidentó en el Turismo de Carretera Pista (TCP) y no podía subirse al Ford. Y contó: "Me preguntaron si me sentía capacitado y dije que obvio sin tener idea de lo que era un TC. Siendo consciente y sabiendo un poco de lo que es un auto de carrera, obviamente te animas. Sirve mucho la escuela del TC Pista Mouras (TCPM), TCM y TCP para el día de mañana cuando agarras un TC estar preparado para manejar eso".
Al mismo tiempo, explicó que "el auto" es diferente al que acostumbra a conducir en el TC Pista Mouras (N. de R.: TCPM, categoría en la que participa) porque tiene "menos carga y más patada de motor abajo y arriba". Además, admitió: "Es algo soñado, el circuito de Buenos Aires es muy lindo para manejar. Vine girando y peleando contra Matías Rossi, Josito Di Palma, (Mariano) Werner, (Carlos) Okulovich y (Juan Pablo) Gianini, todos pilotos de renombre. Venía ahí y la verdad no desentonaba y eso que había girado muy poco. Se planteó un ritmo de carrera de tal tiempo que no era ir a fondo pero era ir un par de segundos más altos pero para llegar a las vueltas con la nafta sino te quedabas tirado".
Si bien aseguró que no se puso "nervioso" en "ningún momento", Junior dejó en claro que tuvo un "poco de miedo" antes de salir a la primera tanda de entrenamiento: "Nervioso no estuve en ningún momento, sólo en los cinco minutos antes de subirme en la carrera estaba con el pie medio loco. Si me ponía nervioso iba a hacer macanas y no quería eso. Son velocidades muy rápidas. En el TCPM no tenemos una pantalla que te dice la velocidad como acá, iba a 260 0 270 kilómetros por hora, una locura".
Jalaf, Solmi y Juan Garbelino concluyeron 15° a nueve vueltas del ganador, Agustín Canapino, quien fue perseguido por Leonel Pernía y Facundo Ardusso. El objetivo, según explicó el piloto de San Pedro, era llegar en el "top 10" pero se rompió la caja de cambios cuando marchaban 12° y perdieron nueve giros por lo que si hubiesen "mantenido el ritmo" llegaban mejor posicionados. Y agregó: "Se hizo un trabajo de equipo muy bueno, desde los jefes hasta los mecánicos hicieron un trabajo excelente. Si no se hubiese roto la caja, que la cambiaron con un trabajo excelente en nueve vueltas, el puesto hubiese sido otro".
Por último, Junior Solmi se refirió a los objetivos que le restan para el 2018 tras haber cumplido su sueño de debutar en el TC: "Primero quiero poder ir a Concepción del Uruguay la próxima fecha y, si podemos andar bien, pelear el campeonato de TCPM. Con la carrera ganada soy uno de los pocos habilitados para salir campeón. Nos encontramos en el prinicipio de los playoffs que todavía tenemos muchas chances de entrar. Ojalá podamos ir a las cinco carreras restantes, sumar la mayor cantidad de puntos y soñar con el campeonato".