En una audiencia celebrada ayer en la sede central del Departamento Judicial de San Nicolás, el Fiscal Marcelo Manso aportó elementos y pidió la prisión preventiva para el único detenido por el asesinato de Pedro Caballero en el boliche Nápole, hecho ocurrido el pasado 14 de noviembre por la madrugada.
Manso entiende que Nazareno Monzón, de 22 años, sindicado como quien blandía un cuchillo durante la pelea que terminó con tres personas apuñaladas, debe permanecer detenido porque existe “riesgo de fuga” y de que, en libertad, pueda ejercer influencia sobre los testigos.
El abogado defensor del joven, el penalista nicoleño Hugo Lima (h) sostiene que el Fiscal no posee pruebas suficientes para mantenerlo preso, por lo que interpuso su opinión contraria y pidió que sea liberado.
El Juez de Garantías Ricardo Pratti tiene ahora cinco días hábiles para resolver la situación de Monzón, cuyos familiares y amigos marcharon por las calles de la ciudad para pedir que lo excarcelen porque, sostienen, “es inocente” y “un perejil”.
Pratti es considerado en el Poder Judicial como un “juez garantista”, por su apego a las garantías constitucionales, lo que le vale elogios y críticas por igual en relación a sus decisiones sobre la permanencia de los acusados en la cárcel mientras esperan el juicio que establezca sin son culpables o inocentes.