Inspectores de Reba detectaron irregularidades en comercios locales
Una delegación del Registro Provincial de Comercialización de Bebidas Alcohólicas recorrió la semana pasada unos 40 negocios en San Pedro. Hubo 21 clausuras, la mayoría porque los locales tenían el certificado vencido. El Reba cuesta entre 750 y 7500 pesos, según el rubro.
El jueves, tras haber recorrido San Nicolás y con el plan de avanzar en otras ciudades vecinas, llegó a San Pedro una delegación del Registro Provincial de Comercialización de Bebidas Alcohólicas (Reba), organismo dependiente del Ministerio de Seguridad. Fueron más de 40 los comercios visitados y 21 los clausurados, según informó la Dirección de Fiscalización.
En camionetas identificadas y con un equipo de inspectores, el propio Director de Coordinación y Fiscalización de Reba, Javier Abbas, encabezó el operativo, que tuvo móviles en diversos puntos de la ciudad, de manera simultánea, lo que de todas maneras no impidió que algunos comercios céntricos y otros de barrio bajaran las persianas y cerraran por ese día, por las dudas.
El organismo provincial llegó para controlar la vigencia del certificado de habilitación para la venta de alcohol que expide la Municipalidad en nombre de esa dependencia gubernamental con sede en La Plata.
Más de 20 clausuras
Comenzaron a las 10.00 de la mañana y terminaron pasadas las 19.00. Aun bajo la intensa lluvia, los inspectores requirieron la documentación, labraron las actas correspondientes en caso de infracción y hasta decomisaron la mercadería donde era necesario, por lo que al final de la jornada tenían varias camionetas llenas de bebidas.
A los comercios que tenían la habilitación al día se los notifica de la visita y a los que no, se les impuso clausura, con notificación al Juzgado de Paz Letrado, donde una vez tramitada la oblea de Reba debían dirigirse para reabrir al público, cosa que hizo la mayoría de los clausurados.
El organismo provincial informó un total de 21 clausuras. Despensas ubicadas en San Martín al 400, Pellegrini al 1400, Mitre al 600, Casella al 500, Casella al 400, Belgrano al 100, y 3 de Febrero al 1800 fueron infraccionadas por tener vencida la habilitación.
Lo mismo sucedió con los supermercados de Simonino y Mitre; Mitre al 2500; y Boulevard Moreno al 1300; también clausuraron una fiambrería de Mitre al 600 y otra de Boulevard Moreno al 1100; y un kiosco ubicado en Ayacucho al 200.
En el rubro gastronómico también hubo clausuras: el bar Girasoles, de Mitre y La Peatonal; el restaurante La matera de Bruno, de 11 de Septiembre y San Lorenzo; el café de La Terminal, en Gomendio y Oliveira Cézar; y la rotisería de Gomendio y San Martín.
El complejo turístico El palmar de San Pedro, ubicado en San Lorenzo y 11 de Septiembre, también sufrió la clausura por carecer de habilitación de Reba. El organismo informó además la clausura del depósito del la verdulería La Panchita, de Pellegrini e Italia, cuyo titular aseguró que le hicieron mal el acta.
Cuánto cuesta el Reba
El Registro Provincial para la Comercialización de Bebidas Alcohólicas fue creado por ley. Tiene a su cargo la nómina de comercios, establecimientos y distribuidoras habilitados para la venta de alcohol.
Los comerciantes deben solicitar la licencia en el municipio donde tengan asiento, pagar el canon correspondiente a su categoría y renovar la autorización cada año.
Las Licencias deberán exhibirse en un lugar visible del local comercial, y en el caso de los distribuidores deberán tener un copia autenticada en el vehículo que transporte la mercadería.
La categoría A corresponde a mayoristas, que pagan 3500 pesos por año. En la B, para comercios minoristas, hay dos subcategorías: B1, almacenes, que paga 750 pesos anuales; y B2, autoservicios y supermercados, que deben abonar 2250 pesos por ejercicio fiscal.
La categoría C está, a su vez, dividida en tres: C1, pizzerías, restaurantes, parrillas, que pagan 1000 por año; C2, bares y confiterías, cuyo canon es de $ 2250; y C3, locales bailables, la más cara, que abona 7500 cada 12 meses.
Hay una cuarta categoría, la D, que es para eventos especiales, que pagan de acuerdo a la cantidad de días en que esté vigente la licencia.
“Pagan en el banco, vuelven al municipio y se les da la oblea. Tienen la obligación de exhibirla al público. Tiene fecha de vencimiento y es anual. Muchas de las sanciones fueron porque las tenían vencidas”, señaló el Director de Rentas, Hernán Abatángelo.