Insólito: Le robaron el caballo, hizo la denuncia, la policía lo llevó al corralón y ahora el animal “desapareció”
Mario del barrio La Tosquera es papá de Cintia, una joven de 22 años que nació con una discapacidad que no le permite movilizarse. El 9 de febrero les robaron el caballo que ella utilizaba practicamente todos los días. Hicieron la denuncia, el animal estuvo secuestrado en la Comisaría y luego fue enviado al corralón, pero cuando los autorizaron a retirarlo, el animal ya no estaba. "Ahora nadie se hace cargo de lo que pasó pero esto es culpa de ellos", aseguró el propietario.
Mario Molina vive en el barrio La Tosquera. Tiene 49 años y una hija de 22 que nació con una discapacidad que no le permite movilizarse con facilidad. Cintia tenía un caballo que le robaron a su hermano el pasado 9 de febrero de la puerta de la casa de su novia.
En el parte policial de ese día se reporta que el caballo -que Mario reconoció en la imagen difundida por la policía- había sido secuestrado cuando dos jóvenes de 19 y 20 años fueron aprehendidos en calle 11 de Septiembre y Bozzano por haber protagonizado un robo a dos mujeres y huir en el animal.
Foto: Animal secuestrado el 9 de febrero por personal policial.
El vecino junto a su mujer radicó la denuncia en la Comisaría Local el mismo día en que ocurrió el hurto. Sin embargo, no lo volvieron a ver más. "Esa es la primer gran mentira: por todos lados dijeron después que el animal ya lo habían devuelto a sus dueños pero no fue así, yo tuve que ir a hacer todos los papeles para que me lo devuelvan, y cuando los hice ya no estaba más", reclamó Mario en La Opinión.
Una semana después, más especificamente el 18 de febrero, el hombre se presentó en la Fiscalía Nº 5 del Dr. Marcelo Manso. Recibió allí la autorización para recuperar y retirar el animal del corralón. Sin embargo, para su asombro, cuando llegó al lugar el caballo de su hija ya no estaba.
Foto: autorización de la Fiscalía para retirar el animal del corralón.
"Me dijeron que en la comisaría no lo podían tener y que por eso lo llevaban para allá, yo lo reclamaba casi todos los días, no es que no lo quise retirar, es más, en el papel que me dieron para retirarlo dice hasta quiénes fueron los que me lo robaron", relató el vecino y agregó: "Se sabía que era mío, pero cuando fui a buscarlo ya no estaba y ahora nadie se quiere hacer cargo de lo que pasó, pero fue su culpa".
A casi un mes de lo sucedido, la familia Molina sigue sin recibir respuesta alguna pese a haber hecho los reclamos en los lugares pertinentes. Según lo detallado a este medio, en varias oportunidades buscaron a los dueños para que "chequearan si alguno de los caballos sueltos en la ciudad era de ellos", situación que además de enfurecer al propietario deja en claro "la irresponsabilidad por parte de quienes debían protegerlo".
"Me molesta que se laven las manos, que ahora nadie sepa nada, que ni siquiera me hayan ofrecido la plata para comprarle a mi hija lo que ellos perdieron, no sé dónde más reclamar", detalló Mario y exigió: "No sé quién, pero algo tienen que hacer. Al intendente le he pedido hasta que me lleve un poco de piedra de la que venden en todos lados cuando sacan, para la puerta de mi casa, porque la combi que lleva a mi nena a la escuela no puede entrar, y ni eso me dieron".