Incertidumbre por la concreción de la millonaria inversión en el Puerto
El memorándum de entendimiento firmado en junio por el Consorcio de Gestión con la empresa Notsa, que planifica el primer puerto de trasbordo del país en San Pedro, vence en las próximas semanas y hasta el momento no está la documentación que permitiría la concesión del predio que requiere el proyecto. Las relaciones con los gremios, la fallida experiencia con la harina de soja y el litigio con Pesca y Casting, parte de las demoras.
El anuncio de inversión más importante de las últimas décadas en San Pedro está a punto de ser un recuerdo de lo que podría haber sucedido si en las próximas semanas no cambian algunas condiciones y se acelera el proceso para la cristalización del proyecto del primer puerto de trasbordo del país en la ciudad.
La propuesta de inversión que quedó expuesta en el memorándum de entendimiento firmado ante el Gobernador Daniel Scioli por el Consorcio de Gestión del Puerto de San Pedro y la empresa National Oil Trading S. A. (Notsa) vence a mitad de mes.
La compañía había anunciado que su idea era comenzar las obras en noviembre y a pocos días de aquel encuentro en la Gobernación enviaron responsables de la empresa que contratarían para las construcciones a desarrollar, quienes relevaron territorio, midieron y planificaron las tareas.
Sin embargo y a pesar de que el titular de la empresa Enrique Martínez repitió la fecha ante Scioli cuando tuvo lugar la primera y fallida experiencia de trasbordo de harina de soja desde barcazas a un buque con destino Argelia, llegó diciembre y el tema está cada vez más frío.
La inversión de 50 millones de dólares anunciada movilizó a la ciudad y generó una expectativa desmesurada en un pueblo acostumbrado a que las grandes propuestas empresariales pasen de largo o se instalen en territorios vecinos.
A poco de andar la aventura, los escollos comenzaron a sentirse y hasta el momento la empresa no presentó la documentación necesaria para lograr la concesión por 30 años del predio que necesita para desarrollar su proyecto, por lo que en la Fiscalía de Estado, que debe aprobar los papeles, todo es carpetas vacías.
Un combo imperfecto
“La empresa Notsa está presentando papeles, otorgar un predio público a un privado debe hacerse con mucho cuidado y se deben cumplimentar una gran cantidad de trámites”, dijo el Presidente del Consorcio de Gestión Mariano Veiga durante la conferencia de prensa de presentación del nuevo Directorio.
“Nosotros como puerto no le podemos garantizar a Notsa la expansión y ellos no quieren hacer una inversión acotada a las dos hectáreas y después tener que entrar en una negociación con un permisionario que tiene el permiso caído”, señaló.
La problemática con Pesca y Casting (ver recuadro) no es la única ni la fundamental. Notsa no presentó ninguna documentación importante y el vencimiento del memorándum está a la vuelta de la esquina.
El problema con Pesca y Casting debería tener una posibilidad de solución, sobre todo si, como sostiene el Puerto, todo indica que el club debería resignarse a su retiro.
La empresa bien podría comenzar con la primera etapa del proceso de inversión, que insume unos 12,5 millones de dólares, y comenzar a trabajar mientras el desalojo avanza en la Justicia.
Lo que no se dice a viva voz se discute por lo bajo y en duros términos: por un lado, cuando Notsa trajo la primera carga con barcazas, la experiencia fue un fracaso y una pérdida de dinero para la empresa. Ello generó roces con los gremios, que fueron solucionándose en mayor o menor medida pero dejaron una tensión latente.
Los actores portuarios que han dialogado con los socios de la compañía tienen algunas dudas respecto a la diferencia de discurso que tienen unos y otros. La Opinión intentó comunicarse con Enrique Martínez sin suerte esta vez, a pesar de que ha tenido buena predisposición al diálogo con la prensa en general y con este semanario en particular en otras oportunidades.
El futuro del puerto
Si el memorándum se cae, como todo hace prever por el poco tiempo de vigencia que queda, existen algunas posibilidades: su extensión en el tiempo, con algunas prerrogativas que obligarán a la empresa a dar mayores certezas respecto de su voluntad de inversión, por un lado; y por otro la libertad de acción del Consorcio para buscar otros inversores.
La segunda es una opción que el nuevo Directorio del Puerto tiene en el horizonte. La aparición de Notsa generó un cimbronazo importante en una anquilosada comunidad portuaria, con pocos actores acostumbrados a manejarse como si el puerto público fuera de su propiedad.
Los roces llegaron con la primera carga de trasbordo con barcazas, cuyo retraso hizo que otro barco tuviera que esperar en la hidrovía para entrar al muelle.
Desde aquella fallida experiencia, además, no hubo más buques de parte de Notsa, a pesar de que se había charlado de dos cargas mensuales, entre la soja proveniente de Paraguay y el cemento que se trasladaría desde San Pedro río arriba.
“Ya se movió la frazada y la cama está revuelta”, graficó un importante hombre del puerto, donde saben que estos seis meses les generaron un aprendizaje que puede ser aprovechado en el futuro.
El nuevo Directorio del Consorcio
La semana pasada, y tras una década, el Consorcio de Gestión del Puerto renovó las autoridades del Directorio. Horacio Frangi por Caproem; Guillermo Allen por la Cámara de Operadores Regulares del Puerto; Martín Palazon, de Sociedad Rural; Matías Franco por el gremio de Marina Mercante; Eliseo Almada por Supa; y Fernández por los permisionarios del puerto, más el intendente Pablo Guacone, son los nuevos integrantes.
Además presentaron un Consejo Consultivo integrado por los directores salientes y otras instituciones de la comunidad que no tienen participación en el Directorio “pero están interesadas en la actividad portuaria”.
La actividad contó con la presencia del Subsecretario de Asuntos Portuarios del Gobierno provincial, Jorge Otharán, quien aseguró que “el gran desafío que tiene San Pedro es abrir la ventana, para que piense su actividad de negocios con el puerto”.
“Las inversiones en el puerto, a diferencia de otros sectores, son inversiones que no se hacen pensando en el corto plazo sino en una gran escala de negocios”, señaló y aseguró que están “invitando a inversores a trabajar en este puerto”.
El problema Pesca y Casting
Afecto a las parábolas, Mariano Veiga dijo sobre el conflicto con el club que es como el caso de “un inquilino que tiene su contrato caído y no se quiere retirar de una casa donde se va a poner una escuela”.
El Presidente del Consorcio explicó que Pesca y Casting tiene el permiso caído “hace mucho tiempo” y que hubo “muy pocas posibilidades de llegar a acuerdos razonables”.
Señaló que cuando llegó el tema de la inversión de Notsa comenzaron un diálogo y redactaron un acta acuerdo que finalmente las autoridades del club nunca suscribieron. Pesca y Casting debía comenzar su traslado y dejar el predio en marzo, terminada la temporada.
“Nosotros como Puerto nos comprometíamos a acompañar y hacer gestiones ante las autoridades provinciales y municipales para conseguir un nuevo predio y subsidios”, dijo Veiga.
El acta nunca fue firmada y, por el contrario, en Pesca y Casting buscan la posibilidad de permanecer en el predio, para lo que comenzaron contactos en la Legislatura bonaerense y enviaron una nota al Gobernador en la que solicitan la sesión de tierras a favor del club.
Poco movimiento
El cálculo para 2014 es que el movimiento portuario fue un 40 por ciento menos que el año pasado, de acuerdo a la información preliminar que maneja el Consorcio de Gestión. Las complicaciones de la actividad exportadora citrícola influyeron en el número
A Nación por el dragado
Otra vez, el Puerto no tiene dinero para el dragado, por lo que recurrió a la Dirección de Vías Navegables de la Nación para que disponga la draga nacional en marzo para las tareas. El Consorcio pagará el combustible y comienza un proceso de concurso de precios para saber cuánto costará.