Hay que arrancar el problema de raíz
Hay que invertir en educación. Los resultados quizás se vean a largo plazo, pero para que una sociedad se mantenga en pie, es fundamental que tenga buenos cimientos. Necesitamos escuelas, más y mejores, en todos los niveles. Cada escuela debería tener su TV, equipo de audio, reproductor de video y DVD, mapas, globo terráqueo, láminas de los más diversos temas, elementos de geometría, elementos para educación física (pelotas, sogas, redes, etc.), instrumentos musicales, material de lectura recreativa e incluso juegos de mesa, necesarios como complemento de la tiza y el pizarrón, los tiempos han cambiado…
Hoy por hoy, sólo hay una manera de mantener a los chicos en la escuela y es logrando que asistan por voluntad propia. Para esto necesitamos de distintas opciones que hagan el proceso de enseñanza-aprendizaje más entretenido y, a su vez, enriquecedor.
Es fundamental estimular con temas diversos y de diferentes maneras, a los alumnos para que encuentren su vocación. A lo largo de su vida escolar, el alumno deberá haber asistido a clases y talleres de, por ejemplo: huerta, cocina, manualidades, arte, contabilidad, entre otras opciones; haber hecho simulacro de elecciones, de entrevista laboral y haber adquirido demás conocimientos, que le permitan tener una inserción exitosa en la sociedad.
Debemos apostar a la educación, debemos apoyar a nuestros maestros.Corren tiempos difíciles, PARA TODOS, esto incluye por supuesto a los docentes, cualquiera sea su nivel. Hay países en los cuales pagan a los docentes por las horas que pasa corrigiendo o preparando actividades en su casa. Hoy, en nuestro país, un docente que pretende mantener un hogar y una familia en las mejores condiciones posibles, debe trabajar todo el día, incluso turno nocturno, esto es: todo el día.
Es en este momento en el que deberíamos ponernos a pensar: ¿En que momento y con que eficacia corrige los exámenes y las actividades de sus alumnos?
¿En qué momento y con qué ganas prepara y asiste a dar sus clases?
Una persona agotada y con recursos escasos para trabajar, da como resultado la calidad de la educación que tenemos y que redunda en la
calidad humana que compone nuestra sociedad.
Además, no podemos dejar de tener en cuenta que en la actualidad la escuela cumple diversas funciones: es comedor, guardería, centro de asistencia social y que de una u otra forma necesitamos de ella.
Una mejor educación no es sólo un beneficio para los estudiantes, sino para todas las personas que conviven con esos estudiantes, que el día de mañana serán personas de bien. Esto es para todos, así que: Exijamos una mejor educación para todos los argentinos. Sólo así se podrán cambiar las cosas. El tiempo nos ha demostrado que las soluciones a corto plazo no surten efecto frente a los problemas, que se siguen agravando. Llevará tiempo pero al fin seremos testigos de resultados genuinos.
Natalia,
e-mail: nataliamc_17@hotmail.com