Querida Lili:
Gracias por haber leído y publicado mi simple carta del 06/05/2013. Debido a esto, mucha gente emocionada me han llamado por el aprecio que tienen hacia “Hugo” y la gran fortaleza que tengo, son simples cosas que uno no deja de agradecer.
Vos y yo creo que somos parecidas en cuanto a nuestro temperamento, vamos siempre de frente a pesar de que a veces nos cuestionan, pero yo agradezco a Dios tener esto, porque no bajamos los brazos nunca, peleo contra todo y todos, no le tengo miedo a nada, ni a nadie, en esta vida he tenido que pasar por situaciones muy difíciles, como dormir “un mes” en “Instituto Ciarec de Rehabilitación”, sentada en una silla todas las noches, y compartida, porque la “prepaga” no quiso cubrir la habitación individual.
Las palabras del jefe de Terapia Intensiva fueron: “Rubia, esto es una ‘maratón’ que comenzás a correr hoy pero no sabes cuándo vas a llegar” ¡Que sabías palabras! ¡Qué verdad tuvo en decirme esto!
Solo al que le toca situaciones como esta o parecidas saben lo que es, pero bueno a vos creo que también te tocó pasar por cosas difíciles pero nunca bajaste los brazos. Seguí “fuerte”, Dios nos pone siempre una mano para sostenernos. En Fleni conocí a la Madre Schoenstatt, muy milagrosa; yo soy muy creyente y en mi hogar tengo a “La Madre” porque soy misionera y ella recorre los hogares más necesitados. Si vos querés puedo alcanzártela a tu radio para que los visite dos o tres días y te acompañe a vos, tu familia y a tu equipo de trabajo.
Un abrazo y gracias por todo.
Zuni
Ads