Fiesta de los mamelucos: aseguran que están identificados los participantes
Un cumpleaños, empleados y empleadas de estaciones de servicio, el uso de mamelucos sanitarios como "protección" para minimizar riesgos de contagio, champagne e integrantes de un grupo que suele ser protagonistas de fiestas clandestinas forman parte del combo que se ganó el repudio de toda la comunidad.
La fiesta de los mamelucos fue el tema de este domingo en San Pedro. Miles de mensajes en redes sociales repudiaron la actitud de de ese grupo de jóvenes que utilizando los mismos elementos que usan médicos y enfermeros para salvar vidas se mostraron en historias de Instagram en plena fiesta clandestina, con música y alcohol.
Tras la publicación de La Opinión, los comentarios y mensajes no cesaron. Muchos coincidieron en señalar las identidades de quienes formaron parte de la fiesta clandestina más repudiada de la pandemia.
Diversas fuentes coinciden en señalar a un grupo de jóvenes como los que aparecen en las imágenes reveladas por La Opinión de esa fiesta clandestina en la que los participantes están vestidos con mamelucos sanitarios.
Hay un apellido que se repite en al menos tres de las personas señaladas. Una de ellas seria el cumpleañero. Incluso, aseguran, los mamelucos sanitarios forman parte de sus herramientas de trabajo puesto que en las estaciones de servicio se utilizan para el despacho de combustible.
Las historias de Instagram que reveló La Opinión provienen de al menos dos cuentas: la del muchacho que cumplió años y organizó el evento y la de una mujer que es su hermana.
La tercera persona con el mismo apellido forma parte de un grupo que asiduamente publica en historias de Instagram imágenes de fiestas clandestinas, entre ellas las que organiza un joven que sería hijo de un reconocido empresario local.
El playero del cumpleaños se desempeña en una reconocida estación de servicios. Su hermana también era empleada en el rubro, como dependiente en shops de esas terminales de combustible. Por eso en las imágenes muchos reconocen a varias personas que trabajan en esa actividad en distintos puntos de la ciudad.
Desde que comenzó la pandemia en San Pedro hubo una gran cantidad de fiestas clandestinas. Todas, en mayor o menor medida, cuando se revelaron a la comunidad recibieron el repudio generalizado.
Ninguna como esta, en la que los protagonistas se vistieron de la misma manera en que lo hacen aquellos que en la primera línea de batalla contra el COVID-19 vieron morir a 166 vecinos y vecinas.
Comentarios
Para comentar, debés estar registrado
Por favor, iniciá sesión