Falsificó documentos, se endeudó y ahora pide dinero para contar su versión
El joven de 28 años de edad protagonista de uno de los casos de estafa y falsificación más importante de los últimos tiempos, aseguró que aceptaría una entrevista sólo a cambio de dinero. “Perdí mi trabajo por las cosas que se dijeron de mí”, explicó para excusarse, pero no quiso ofrecer más datos sobre la situación por la que está siendo investigado por la justicia federal de San Nicolás. Había comprado diferentes productos a nombre de otros falsificando DNI y recibos de sueldo. No se salvó ni su primo.
Jorge Alberto Carcomo parece tener una personalidad muy especial, tanto que lo ha llevado a actuar naturalmente ante una gran cantidad de personas durante un buen período, a pesar de que estaba cometiendo un grave delito como falsificar documentos y presentarse en nombre de otra persona simplemente para obtener beneficios económicos.
Carcomo cruzó todos los límites, cuando este medio quiso dialogar con él al cierre de esta edición, luego de que la justicia federal lo liberara y solicitó dinero a cambio de una entrevista periodística.
Dijo entonces, que había sido perjudicado desde la semana pasada porque perdió su trabajo ante la exposición pública que el caso tuvo, y que por ese motivo pensaba que era lógico solicitar una remuneración económica a cambio de su testimonio.
“Se dijeron en La Radio muchas cosas de mí, muchas mentiras”, dijo Carcomo a la periodista que lo llamó. Como recibió una respuesta negativa a la posibilidad de que el medio le abone por sus declaraciones, inquirió: “¿vos no cobrás por nota?”, y como también la respuesta fue negativa entonces explicó que “no le convenía” continuar dialogando, pero antes agradeció la llamada. Después fue imposible volver a comunicarse con él para obtener más información y por supuesto, como es de procedimiento: su versión de los hechos.
La situación de Jorge Carcomo se decide en la justicia porque si bien está libre, sigue procesado en una causa federal grave. La fiscal Terreno, a cargo de la UFI Nº 3 de San Nicolás, explicó a este medio que si bien la investigación se inició en su dependencia por estafa, tras la denuncia que hizo el primo del imputado, ahora también interviene la Fiscalía Federal de San Nicolás a cargo del Dr. Patricio Murray. “Estamos evaluando las pruebas pero todavía no podemos comentar nada más”, explicó la Dra. Terreno.
El delito federal que se le imputa a Carcomo es falsificación de documento público, y los datos que han brindado comerciantes y particulares de San Pedro son contundentes.
Además, en los últimos días, se conocieron más historias que jamás fueron denunciadas en la comisaría local pero que también incriminan a Carcomo por haber adquirido productos que jamás abonó, en ocasiones con su nombre y apellido verdaderos.
“Simpático y agradable”
Las personas que tomaron contacto con Carcomo en diferentes comercios de la ciudad, en el mes de Julio pasado, comentan que les pareció una persona realmente “agradable”, y que en todo momento se mostró tranquilo a pesar de presentarse con otra identidad y mostrando un documento falso.
“Vino resuelto, alguien totalmente normal, amable, simpático. Todavía nos pusimos a hablar de la empresa en donde él supuestamente trabajaba, Frutales, y me contó del tema de la exportación”, comentó una empleada de un comercio.
En pocos días, este joven dejó un verdadero “tendal” de deudas sin siquiera intentar huir de la ciudad. Pero algunos comercios habían detectado alguna irregularidad. Es el caso del local de Red Megatone, donde Carcomo se había presentado también a principios de Julio aproximadamente. Cuando mostró su documento, con el nombre de su primo Horacio Laurentino Carcomo pero la foto suya, tampoco se inmutó y se mostró tan natural que nadie habría sospechado. Pero los empleados detectaron que el sello del Registro Civil que se coloca mitad sobre el papel y mitad sobre la foto no coincidía y por eso sospecharon que podría haber sido adulterado.
“La gente a veces se molesta porque nosotros somos muy cuidadosos con eso. Hay personas que cambian la foto por su cuenta porque la pierden o se le despega. Pero tienen que hacerlo en el Registro Civil”, explicó el gerente de la sucursal.
Además de negarle la posibilidad de un crédito, los responsables de Megatone le solicitaron una garantía y lo llamativo es que Carcomo regresó, pero tampoco en ese caso cumplía los requisitos por lo que se marchó y ya no volvió por allí.
Otra joven empleada, entre risueña y ofuscada por la impunidad con la que se manejó este joven en toda la ciudad, comentó que este lunes lo había cruzado por la zona céntrica. “Me vio pero se hizo el tonto”, explicó todavía sorprendida.
Padre de familia
Jorge Carcomo no tiene otros antecedentes policiales por delitos, y sí se lo conoce por ser afiliado al gremio SEDA como un trabajador más. A través de este sindicato estuvo empleado, por ejemplo, en la firma Frutales hace un tiempo y por eso se supone que pudo falsificar un recibo de sueldo de la empresa.
Es padre de un niño y vive en pareja en Alvarado 867, una casa de material a medio terminar ubicada en un terreno que compartido con otra propiedad habitada por familiares, que se negaron como él a hacer declaraciones sobre lo ocurrido. La misma negativa a hablar fue expresada por la madre del joven, quien explicó que desde hace tiempo no tiene relación con él, y la esposa de su primo Laurentino que explicó que “no tenemos ni trato, casi ni lo conocemos”.
Él le puso precio a su verdad y dice que todo lo que se ha dicho es mentira. Está en libertad, pero la Justicia sigue su investigación. Sería bueno, para que la información no se distorsione que acepte contar su versión de los hechos, sin percibir dinero a cambio. Para ello se le ha ofrecido espacio en La Radio y La Opinión.
Falsificador
Las andanzas de Carcomo se cerraron cuando su primo lo denunció tras recibir diferentes intimaciones de comercios en los que había comprado en cuotas distintos productos, desde ropa de cama hasta bicicletas, y un TV color. En su casa, la policía encontró el DNI duplicado del denunciante, Laurentino Horacio, pero con su foto colocada prolijamente. La investigación ahora apunta a establecer si se trata del documento original porque según dijo el damnificado él había gestionado en el Registro Civil un duplicado que nunca retiró porque luego halló el que había extraviado. Pero para que su primo pudiera retirarlo por él, debió presentar o el comprobante del trámite o bien una copia del acta de nacimiento, algo que se supone no tenía.
También otro DNI a nombre de Elvio Arturo Quiñones fue hallado en poder de Carcomo, así como dos carnet de conducir a nombre de Alfredo Oscar Gómez (un ex compañero suyo de trabajo) y Víctor David Leroux, y recibos de sueldo ya impresos listos para ser presentados, discriminados y con un sueldo de 1.499 pesos. Esta última documentación era idéntica y sólo cambiaban los nombres de los supuestos empleados, uno correspondiente a la empresa Granix de Baradero a nombre de Quiñones (que fue Jefe de Personal de esa firma) y otro de la empresa Frutales a nombre de Gómez.