Extranjeros en su país
Dice el cacique CAYUQUEO de las tolderías de Los Toldos, que cuando evitaron el remate de 210 hectáreas en esa zona, propiedad de los aborígenes, hace de estos muchos años, su abuelo viajó hasta Buenos Aires a entrevistarse con un Coronel de apellido PERON que -decían las lenguas- era de origen indio y podía ayudarlos. Aunque les cueste creerlo, en ese entonces debían ir acompañados por algún funcionario de la Dirección Nacional de MIGRACIONES, es decir que eran tratados como si fueran EXTRANJEROS en su propio país. Refiere que PERON los escuchó, llamó al General FARRELL le pidió que dictara una norma que evitara esa incuria de tratar como foráneos a los únicos argentinos puros que vivían –y viven en nuestra tierra. En la actualidad en el ámbito nacional los indios son tratados muy mal por dos poderosas razones: son indios y además… pobres en la inmensa mayoría de los casos!!. Hoy muchos miles y miles de hectáreas de propiedad indígena en virtud del Artículo 75 de la Constitución Nacional, se encuentran amenazadas por la voracidad de los “blancos” que intentan quedarse con lo que no es suyo. En la zona de RIO NEGRO existen muchos pobladores que están agrupados en zonas aisladas pero viven en comunidad, participando de la tierra a la que consideran común y que no puede ser apropiada por nadie en particular porque los va –nos va- a sobrevivir. Allí se ha visto la voracidad de muchos extranjeros que, les parece mentira que existan esas enormes extensiones de tierra apenas molestadas por los aborígenes que las cuidan con pulcritud. Ese mismo fenómeno existe en otras provincias donde la población indígena es un componente importante, es el caso de FORMOSA, CHACO, SALTA, JUJUY y aún en el Gran Buenos Aires donde existen miles y miles de habitantes de origen aborigen y que, se encuentran muchas veces abandonados a la buena de Dios desde los ámbitos oficiales. Se los trata de ayudar de diversas maneras con becas para los estudiantes primarios, secundarios y universitarios, planes Mano a la Obra, etcétera. Se van viendo los frutos: muchos de los estudiantes indios –muchísimos- hoy están cursando una carrera en las distintas universidades del país. Esa circunstancia es la que los va a salvar -la educación- como a todos los pobres y desclasados de este país. Desde el Siglo XIX hasta la actualidad, desde Sarmiento, Estrada y otros eminentes educadores, la carencia de conocimiento es el caldo de cultivo de la explotación, conocer la verdad -lo que es justo y equitativo- los hará libres, como decía JUAN en su Evangelio… Tan vigente este rebelde Juan…un revolucionario como su maestro. por el Dr. Elvio Macchia