“Con qué le doy: ¿Con un caño o con el ojo del hacha?”
Usted dice de interés público el papel de diarios. Yo creía que de interés público era una propiedad donde es necesario abrir una calle o construir una ruta. Jamás pensé que podía serlo una fuente de trabajo o tal vez me equivoqué y Papel Prensa está fabricando rutas. De no ser así, es como dijo Usted: “Hmmmmmmm”.
Pienso que Usted no debe tener más de 35 años y le digo por qué: En la década del 70’ los militares toman el gobierno y sacan varios comunicados diciendo que “la guerra con los elementos subversivos sería hasta el final” y las penas eran de reclusión o muerte, y se confiscaban todas sus pertenencias, o sea: “legalizaban el robo”
La familia Graiver es detenida en marzo del 77’, en la seguridad de que eran montoneros. Los militares tenían casas, departamentos, mansiones, yates, aviones, editoriales, estancias, hoteles, varios bancos y Papel Prensa. Más de 500 palos verdes. El problema fue que la fabrica se había vendido cinco meses antes a tres grandes diarios, como los involucraban tenían que inventar una mentira más grande que el Aconcagua imposible de sostener. Pavada de garrón se comieron. Sr. Juan Cruz: los Graiver se salvaron porque vendieron cinco meses antes (noviembre del 76’), como declaró y certificó Isidoro Graiver, de no ser así hoy serían pensionistas de una tumba NN y hubiesen dado un comunicado así: “Cayeron los principales cabecillas de Montoneros”
Por lerdos se perdieron un fangote, si llegan cinco meses antes se ponen las botas.
Para bol… no se estudia, se nace.
José Larralde dijo: “Cuando no se quiere ver / no hay más que cerrar los ojos / Pero no es bueno a mi antojo / ser ciego por voluntad / Castiga más la verdad / en rancho que usa cerrojo”.
Por lo que dijo Usted, pareciera que quiere ser funcional o algo y a causa de eso más de un hombre se convirtió en pájaro y aprendió a vivir en jaula.
Le cuento: A uno de mis hijos le enseñé algo que dice así: “Las cosas hay que pensarlas antes. Después que gatillás, no le pidas perdón al juez. No está para perdonar. Está para condenar. Si es para salvar a tu hijo, no pierdas tiempo pensando. Antes que perder un hijo, es mejor vivir en jaula”.
Usted dijo cómo olvidar que fue Escriba de Bussi. Usted está condenando a un empleado porque su patrón fue un maldito. No pierda más tiempo, mándelo preso.
Yo no puedo condenar a un chico solo porque su madre haya sido una rutera.
Tampoco a las fuerzas Armadas, por culpa de Videla, Agosti y Massera.
Usted dijo Fascismo, Totalitarismo, Estado Terrorista, Autoritarismo, censura, como si estuviera ofendido de lo que se dice o comenta de nuestro Gobierno.
En la década de los 50’ el gobierno le enseñó a sus partidarios esta frase: Para un peronista, nada mejor que otro peronista. Al enemigo, ni Justicia; y creó una Asociación paramilitar similar a la Triple A: Comando táctico, así se llamó. Los partidarios dibujaban una cruz negra en la puerta del que era de otro partido. Cuando se la pintan a mi padre, huyen con su socio a Montevideo. Pero acá viene algo cómico que les pasó: Cuando llegan a Gualeguaychú, unos paisanos les ofrecen unos caballos para recorrer los últimos 15 km. hasta el río Uruguay. Cuando llegan al río el lanchero les dice que se escondan en el monte de Ñandubay: “Allí hay otros escondidos y vengan todos juntos a la noche”.
Cuando se juntan con el lanchero, éste les dice: “Muchachos, los caballos no, eso es contrabando y cuatrerismo”. La respuesta fue: “No importa, se lo regalamos”, y se arma de una tropilla.
Cuando regresan en el año 55, van a saludar al lanchero que no los reconoció. Mi padre le dice: “¿No recuerda que le regalamos los caballos?”. El lanchero se ríe y dice: “Muchachos, yo pasaba como 100 tipos todas las noches. Mis hermanos vendían esos caballos al día siguiente y yo los recuperaba a la noche, y así todos los días. Lástima que cayó el gobierno, pero igual nos armamos de un campo”.
Sr Juan Cruz, en esa época mi madre, mis hermanos y yo pasamos hambre. No estoy afiliado a nada, tanto a los oficialistas como a sus opositores los quiero como a un dolor de muelas.
José Larralde dijo así: “No se si me explico / pero entiéndase mi explique / Pa’ que el barro no salpique / se debe pisar despacio / El hombre a de ser reacio / con causa que justifique”.
Señor Juan Cruz Blanco: Hace un siglo que Pasteur creó la vacuna antirrábica; los libros de nuestra historia están todos vacunados, no les tenga miedo: Sabe por qué usted comenzó diciendo “tuvieron que inventar un relato y una historia oficial, dichos por fulano y mengano” y ni siquiera los nombró. ¿Sabe por qué? Muy sencillo: dicen que su patrón quiere escuchar pero la pena de (muerte y las tumbas NN) no son ningún invento.
La señora Papaleo hubiera sido boleta.
No defiendo al patrón de nadie, me remito a los hechos y sino pregúnteselo a Bonafini
El Escriba de Bussi hizo lo que su patrón quería leer. Si usted tiene hijos, algún día va a hacer lo mismo. Debe ser muy feo ver a un hijo pasar hambre.
Tenga cuidado, el pez por la boca muere.
Usted dijo “matrimonios igualitarios”. La Constitución dice que para ser Presidente hay que ser argentino nativo, casado, y eso los habilita. Se imagina en una cumbre presidencial al nuestro diciendo “señores les presento a mi marido”. Va a ser un espectáculo nuestra primera dama.
Matrimonio viene de matriz, de madre y yo no puedo comparar la mía con un “trolo”. Sobre gustos no hay nada escrito. Desconozco los gustos suyos. Nuestra futura primera dama va a manchar el honor de la celeste y blanca.
Somos distintos. Usted ve y escucha el presente. Yo veo el pasado y miro el futuro. Yo soy sanpedrino, modelo 48’; y Usted, ¿qué modelo es?
Sr. Juan Cruz: No se olvide de Pasteur, dicen que fue un buen tipo y puede ser cierto, porque conmigo nunca tuvo una discusión
Usted dijo “no les molesta a los sampedrinos la libertad que tenemos para elegir entre Multicanal, Cablevisión”. Yo le preguntaría a Usted si se enteró que nuestra Cooperativa Eléctrica tuvo que cajonear el proyecto de cable por falta de apoyo.
Señor Juan Cruz: ¿Usted se anotó a la Coopser solicitando el servicio? La culpa no es del chancho sino de quien le da de comer. No culpemos al patrón, al fulano y mengano, la culpa es nuestra. Vayamos a la Coopser y desempolvemos ese proyecto. Eso sí, no sea que en un par de años diga “miren la libertad que tenemos para elegir entre la Coopser, la Coopser y la Coopser”.
Otra de Larralde: “No he de dudar un instante / ni e de achicar el intento / La libertad es un cuento / si no se lucha por ella / No sólo para las estrellas / tiene luz el firmamento”.
Si provoqué alguna ofensa, me disculpo públicamente, así no tengo que rectificar o retractarme.
Rubén Darío Courtade – DNI 5.087.026
Ads