En Marzo inauguraría el Howard Johnson Resort
Los cálculos indican que a mediados de Marzo, podría abrir sus puertas el nuevo resort de la cadena que se construye en la costa, pero antes se realizará una presentación pública. El monumental complejo cuenta con 8.500 metros cubiertos a todo confort en el que trabajarán 80 personas. Un SPA de 1.200 metros cuadrados y una piscina, en parte climatizada, de otros 1.400 metros cuadrados, dos canchas de tenis y una de paddle. En las 50 habitaciones se podrán alojar más de cien personas y otras 200 en el sector de camping. Además de la playa privada, se construye un amarradero de lanchas y barcos, restaurante, salón de fiestas y un minishop. Los pasajeros que se alojen en el hotel de Mitre y Liniers, también podrán utilizar estas instalaciones costaneras y habrá un servicio gratuito de transporte para las recorridas.
En poco tiempo más, la costa de la ciudad atraerá a turistas que busquen algo más que contacto con la naturaleza. El Howard Johnson Resort que se construye en el predio donde funcionara el camping Cooproyco promete ser un espacio para el descanso y el confort, porque contará con un servicio de SPA sin precedentes en la región.
Los responsables de la misma empresa que construyó el Hotel ubicado en Mitre y Liniers, y que ahora ultima detalles de este emprendimiento, confirmaron a La Opinión que en el término de un mes y medio podría estar en condiciones de abrir sus puertas. “Dependemos del tiempo, porque la lluvia nos complica y ahora se inician los trabajos de parquización”, explicó Jorge Muscia, el responsable del hotel céntrico.
El arquitecto a cargo de la obra es Marcelo Pérez, quien diseñó y ejecutó las obras del primer edificio del Howard Johnson construido en San Pedro y de otros cinco similares que se edificaron en el país. El profesional estimó que la obra edilicia estaría culminada en un mes, a mediados de Febrero, pero a partir de ese momento comenzarán las tareas de instalación de equipamiento y los últimos detalles.
El objetivo de la firma, que comenzó los trabajos en el mes de Julio, era abrir las puertas en plena temporada de verano pero el clima inestable y las cuestiones propias de cualquier obra de construcción demoraron la apertura.
Antes de la inauguración oficial, la empresa que cuenta con la franquicia de la cadena hotelera brindará una presentación para la prensa y las autoridades locales, para que todos conozcan las características de este emprendimiento turístico que La Opinión adelanta en forma exclusiva.
Trabajo para 80 personas y alojamiento para 300
El nuevo resort empleará a 80 personas para atender los diferentes sectores del complejo que cuenta con 8.500 metros cuadrados cubiertos.
La capacidad promedio de alojamiento será de 300 pasajeros, porque se calcula que algo más de 100 ocuparán la totalidad de las habitaciones y otras 200 pueden instalarse en el sector de camping.
El movimiento será intenso porque los pasajeros del Hotel céntrico también podrán tener acceso a la playa y servicios que brinda el resort. Por ese motivo, se ofrecerá un transporte gratuito para movilizarse desde el centro a la costa, a cargo de la empresa.
Muscia confirmó que parte del personal que trabajará en el nuevo resort se está capacitando para sus tareas y que se intenta que la totalidad del plantel esté integrado por sampedrinos que encuentran aquí una nueva fuente de trabajo.
La magnitud del emprendimiento es relevante también por la cantidad de personas que trabajaron en la construcción. Aunque resulta difícil contar con una cifra exacta, en promedio trabajaron en forma constante unos 200 obreros. “Cuando arrancamos había 28 empresas contratistas trabajando, ahora quedan unas 17”, explicó uno de los encargados del predio.
El resort sampedrino de la cadena Howard Jonson será único por varios motivos. El arquitecto Pérez confirmó que por el tipo de construcción no existe otro en la provincia de Buenos Aires con estas características, y sólo uno se asemeja en el resto del país, construido en la provincia de San Juan, aunque de dimensiones menores y con la modalidad de “tiempo compartido”.
1.200 metros de SPA
Sin duda que el servicio de SPA es el que le otorga la mayor relevancia al complejo que funcionará en la ex Cooproyco, y lo demuestran los 1.200 metros cuadrados cubiertos que ocupa este sector.
Está ubicado en el ala izquierda frente al restaurante, pero lo más impactante a la vista, es la enorme piscina con caprichosas formas que comienza al aire libre y termina en el interior del SPA. Una división interna de esta piscina de 1.400 metros cuadrados totales, permite diferenciar el sector climatizado. La parte descubierta, incluye una piscina interna y circular de menor profundidad destinada a los niños, y hasta una barra de un bar para que los bañistas puedan tomar tragos mientras están en el agua, al mejor estilo de los hoteles caribeños.
El edificio del SPA está equipado con 20 habitaciones pequeñas o cabinas para masajes corporales, dos saunas para hombre y mujer, dos sectores de hidromasajes con ozono, una sala de relax equipada con reposeras, tres duchas escocesas y un sauna finlandés. Hacia el final del edificio, y con acceso desde la piscina, se ubica un enorme gimnasio que contará con equipamiento de última generación en aparatos de pesas, pilates y cintas para correr o caminar, entre otros.
Por último, los amantes del deporte podrán optar por un partido de tenis en las dos canchas que se instalaron a continuación o bien de paddle, en la construida para la práctica de esta actividad.
Lujo con vista al río
El complejo ofrecerá al pasajero alojamiento en un total de 50 habitaciones de tipo “dormis”, cada una con terraza propia y excelente vista. Fueron construidas en tres grandes cuerpos en alto que se extienden desde la costa en terrenos ganados al río.
Cada uno de estos cuerpos de dormis, terminan con una habitación en suite y una terraza con la mejor vista panorámica. Estas dependencias tienen baños con hidromasaje y vestidor. Del total de 50 habitaciones, diez son denominadas “de lujo” y cuentan también con sistema de hidromasaje, y el resto son “standards”.
A cada una de ellas se accede por una escalera de madera individual, y debajo se ubican, de dos en dos, sectores individualizados para estacionar automóviles. En el interior, los pisos serán de madera laqueada, las paredes estarán revestidas con papel de diseño sobrio siguiendo el estilo de la cadena hotelera, y se colocarán muebles de madera. Sólo las suites se diferenciarán por contar con mobiliario de rattan.
Entre el primer y el segundo cuerpo de habitaciones, se ubica la playa de uso exclusivo para los pasajeros del complejo. Es el mismo sector donde históricamente funcionó la playa de Cooproyco, que ahora será rellena con arena y totalmente desmalezada. Se colocarán 20 de las típicas sombrillas de paja, además de reposeras y otras comodidades para disfrutar del sol y el agua.
Entre el segundo y el tercer cuerpo de dormis, estará instalado un amarradero de lanchas y barcos, con un muelle para que los pasajeros puedan pasear, y acceder a las embarcaciones. En ese sector estará amarrado el barco que compró el Howard Johnson Obligado y en el que se realizarán paseos diarios por el río.
El camping
El complejo ofrecerá al visitante la posibilidad de acampar en parcelas equipadas con las comodidades necesarias para el amante de la vida al aire libre.
Las mismas están delimitadas en el sector del terreno que quedó libre entre la playa y la Av. España. El arquitecto Pérez explicó que en el proyecto se priorizó que las construcciones edilicias no interrumpieran la vista al río y el sector de islas desde la avenida costanera, y por este motivo las habitaciones se construyeron en forma perpendicular a la calle, y se ubicó el camping en ese sector.
Cada parcela cuenta con espacio para una carpa y un automóvil. Tiene parrilla individual y separada de la parcela siguiente, bajada de energía eléctrica e iluminación.
Los acampantes improvisados, podrán alquilar la carpa en el mismo lugar y elegir el servicio de media pensión del resort. Siempre con acceso al resto de las opciones para pasar una estancia inolvidable.
Y por último…
El resto de las instalaciones del resort, las componen el restaurante y salón de fiestas ubicados en el ingreso al predio. Los mismos ocuparán en el mismo orden el mismo edificio donde funcionaban antes, aunque fue totalmente refaccionado. También se respetó y amplió la terraza de la parte posterior, que da ahora sobre la enorme piscina y que será equipada con mesas y sillas para que los comensales disfruten de sus comidas al aire libre. El restaurante, que estará abierto también al público en general, funcionará en forma separada del salón de fiestas que también se alquilará para eventos y fiestas particulares. A continuación, se construyó un lavadero y depósito.
Desde la calle, donde funcionaba la antigua recepción del camping, se accede al lobby, un gran salón con mostrador donde se atenderá a los pasajeros recién llegados. Allí se instalarán cómodos sillones y aparatos de TV, tanto para quienes aguardan su ubicación en las habitaciones como para quienes deseen disfrutar de sus ratos de ocio.
En otro edificio pequeño y adyacente, se instalará un locutorio con servicio de Internet. El servicio de telefonía o conexión se brindará tanto a los pasajeros del resort como a cualquier turista que esté alojado en la costa, teniendo en cuenta que el lugar tiene acceso individual desde la calle.
El gerente Jorge Muscia confirmó que la recepción de reservas para el nuevo resort sampedrino se centralizará en el edificio de Mitre y Liniers, pero que los costos de alojamiento en uno u otro lugar serán similares. El objetivo es que los pasajeros cuenten con todas las opciones que les ofrece San Pedro: tranquilidad, bellos paisajes, vida al aire libre, playa de río, y todo el confort de la cadena Howard Johnson.
El sector público
De acuerdo a la ordenanza sancionada en el HCD la concesión del predio será por 30 años y establece que en paralelo la empresa que afronte la inversión deberá destinar un sector de acceso para todo público. Estas obras, deberán también estar finalizadas cuando el Resort abra sus puertas. La ordenanza en el artículo séptimo menciona que sobre el predio, hacia el Este, “el concesionario está obligado a realizar los paseos vehiculares, peatonales, baños públicos, asfaltos, rellenados, playas y parquizaciones proyectadas en la oferta de inversión, quedando exento así de cualquier canon”. El mantenimiento del predio y la inversión en el nuevo Paseo Público estará a cargo de la empresa durante los 30 años de la concesión.
Este nuevo espacio será diferente al que ya se cuenta en la costa, puesto que está previsto un acceso, gratuito, al río y a la playa, pese a que sus dimensiones son más reducidas de lo que se pensaba en un principio.