En dos meses, el gobierno ya usó casi 20 millones de fondos afectados para pagar sueldos
Mediante decretos del intendente y amparados en una ordenanza de "emergencia económica" que ya no tiene vigencia, el gobierno destina todos los meses sumas importantes de recursos afectados como el Fondo Eduactivo y el Fondo Sojero para hacer frente a gastos corrientes. "Los gastos siguen siendo mayores a los ingresos corrientes", dijo Salazar en su mensaje anual.
En su mensaje anual, un año después de anunciar superávit, el intendente Cecilio Salazar dijo que "los gastos siguen siendo mayores a los ingresos corrientes, lo que obliga a un muy meticuloso manejo de los recursos públicos para afrontar gastos tan elementales como el pago a los trabajadores”.
Evidencia de ello son los decretos de transferencias de recursos afectados a la cuenta de gastos corrientes, con el objetivo, cada principio de mes, de pagar los salarios de los trabajadores en tiempo y forma. Al igual que en 2016 y 2017, no podrían cumpir con ese compromiso si no utilizaran ese dinero.
En lo que va del año, y sólo para pagar los sueldos de febrero y marzo, el Ejecutivo echó mano de casi 20 millones de pesos de recursos que vienen con afectación especial, es decir estrictamente destinados a un fin específico.
El 5 de abril, para pagar los salarios de marzo en tiempo y forma, el gobierno echó manos de 5 millones y medio de pesos de fondos afectados. Fueron 3 millones del denominado Fondo Sojero y 2,5 millones del Fondo Educativo.
El 5 de marzo, para pagar los sueldos de febrero, lo mismo. El Tesoro municipal necesitó tomar 6 millones de pesos de las cuentas que no pueden usarse para gastos corrientes, porque no llegaban con los ingresos habituales. Salieron del Fondo Sojero.
Unos días antes, el 1 de marzo, el intendente autorizó por decreto a transferir 5.600.000 pesos del Fondo Sojero, también para priorizar "el pago de salarios y la prestación de servicios básicos.
El uso de fondos afectados para fastos corrientes está justificado en los decretos a través de la cita a una ordenanza que ya no está vigente: la que declaró la "emergencia económica" por seis meses en 2016 y que no tuvo prórroga.
Desde ese año, cada mes sucede lo mismo: toman recursos afectados para pagar sueldos, autorizan esa transferencia vía decreto del intendente y ponen en los considerandos que "por indicación expresa del intendente municipal se está realizando un estricto control de las erogaciones, privilegiando el pago de salarios y la prestación de servicios" y que la ordenanza de "emergencia económica" les "permite" hacerlo.
La "emergencia económica" perdió vigencia en julio de 2016, el mismo mes en el que el intendente autorizó un aumento y otorgamiento de bonificaciones para los funcionarios del gabinete, que les duplicó los sueldos. Ese decreto no lo publicaron sino hasta que La Opinión reveló su existencia.