El último parte de Agustín y Diego Iglesias, los hermanos que sufrieron quemaduras en el incendio de una panadería
Sobre Agustín, el joven de 20 años que fue derivado el martes desde el Hospital Emilio Ruffa al Instituto del Quemado en Capital Federal, su familia informó que "se complicó con el tema de las infecciones", por lo que "hay que esperar" y, tal como le indicaron los médicos, si "todo sale bien" después llegarán "las mejorías". Diego, el chico de 19, por su parte, permanece en terapia intermedia en el nosocomio local a la espera de un traslado a un centro de mayor complejidad.
La familia de Agustín y Diego Iglesias, los hermanos que el lunes sufrieron graves quemaduras al incendiarse una panadería en Manuel Iglesias al 2100, dieron a conocer hoy luego del mediodía el último parte médico de los jóvenes que permanecen internados.
El joven de 20 años, que fue derivado el martes por la tarde al Instituto del Quemado en un avión sanitario que partió desde Baradero, presenta un cuadro que se agravó ayer porque "se complicó con el tema de las infecciones" y "hay que esperar", explicó la familia. Tal como indicaron los especialistas, "es probable que después tenga agua en los pulmones" pero si "todo sale bien", en las horas posteriores llegarán "las mejorías".
Diego, de 19, por su parte, continúa en terapia intermedia en el nosocomio local a la espera de un traslado a un centro de mayor complejidad para continuar con su recuperación.
Mientras tanto, sus amigos organizan una choripaneada y hamburgueseada para el próximo viernes desde las 20.30 en San Martín 350 para recaudar fondos y ayudar a la familia. Por ello, solicitan que quienes puedan donar chorizos, hamburguesas o pan se comunique con ellos al 3329-545005.
El siniestro se originó el lunes al mediodía en la parte posterior del comercio. Las llamas comenzaron en un tubo de gas de 45 kilogramos que alimenta un horno y los tres masculinos que estaban en el lugar, el propietario de 40 años y los dos jóvenes empleados, quisieron sofocarlo por su cuenta y fueron alcanzados por el fuego que apagó una dotación de Bomberos Voluntarios a cargo de Héctor Keudell que llegó enseguida y lo hizo en escasos minutos.
Las víctimas fueron trasladadas en un auto particular al nosocomio local donde se constató la gravedad de las lesiones y se pidieron inmediatamente sus derivaciones.