El sueño de los pibes
Junior Solmi y Fernando Iglesias debutaron el domingo en el Turismo de Carretera (TC) como invitados de Matías Jalaf (Ford) y Martín Serrano (Chevrolet) respectivamente en los 1000 kilómetros de Buenos Aires y, a su corta edad, lograron una de sus metas en un día histórico para San Pedro.
Tal como lo sostuvieron públicamente y a pesar de que llegaron de diferentes maneras, Junior Solmi y Fernando Iglesias -h- cumplieron el domingo su sueño de debutar en el Turismo de Carretera (TC), la categoría más importante y popular del automovilismo nacional donde se miden los mejores pilotos, autos y equipos.
Los jóvenes de San Pedro compitieron como invitados en la segunda edición de los 1000 kilómetros de Buenos Aires que se desarrollaron en el autódromo Oscar y Juan Gálvez en el marco de la novena fecha del campeonato que lleva adelante la Asociación Corredores de Turismo de Carretera (ACTC).
Solmi integró el equipo de Matías Jalaf (Ford) quien lo incorporó el sábado a último momento porque Aldo Ortíz se accidentó en el TC Pista (TCP) y no estaba en condiciones de conducir el auto. El elenco que también integró Juan Garbelino concluyó 15° a nueve vueltas del ganador, Agustín Canapino. El podio lo completaron Leonel Pernía y Facundo Ardusso. Solmi manejó el Ford de Jalaf poco más de una hora de las casi seis que se extendió la competencia y se bajó porque tuvo un inconveniente en la caja.
Iglesias, por su parte, debutó en el TC con Martín Serrano (Chevrolet) en el equipo que completó Jonathan Vázquez y acabó 18° a trece giros del triunfador. “Morro”, que fue confirmado a mediados de julio como uno de los acompañantes del piloto de Pablo Nogués, partido de Malvinas Argentinas, y se convirtió en el tercer integrante de su familia en afrontar una competencia después de su papá, Fernando, y su hermano Juan Manuel; estuvo en
la pista durante buena parte de la final y se codeó con los exponentes más destacados de Argentina.
Para San Pedro, que todavía recuerda las andanzas de Esteban Sokol, Osvaldo “Pato” Morresi y los Iglesias, fue una jornada histórica porque dos de sus promesas en el deporte tuvieron su primera experiencia en el TC a donde apuntan a llegar en un futuro, objetivo para el que tendrán que seguir acelerando y maniobrando por caminos sinuosos y empinados.
Testimonios
Solmi: “No asimilé en ningún momento pasar de un momento a otro a tener que subirme al auto. Estaba tomando mates y un integrante del equipo de Jalaf me preguntó si quería correr y me sentía capacitado porque Aldo Ortíz se accidentó en el Turismo de Carretera Pista (TCP) y dije que obvio sin tener idea de lo que era un TC. Es algo soñado, el circuito de Buenos Aires es muy lindo para manejar. Vine girando y peleando con pilotos como Matías Rossi y otros de renombre. Venía ahí y la verdad no desentonaba. Se planteó un ritmo de carrera de tal tiempo que no era ir a fondo pero era ir un par de segundos más altos pero para llegar a las vueltas con la nafta sino te quedabas tirado. Nervioso no estuve en ningún momento, sólo en los cinco minutos antes de subirme en la carrera estaba con el pie medio loco. Si me ponía nervioso iba a hacer macanas y no quería eso. Son velocidades muy rápidas. En el TCPM no tenemos una pantalla que te dice la velocidad como acá que iba a 260 0 270 kilómetros por hora, una locura. El objetivo del equipo era llegar en el top 10 pero la rotura de la caja nos retrasó, se hizo un trabajo de equipo excelente y la arreglaron en nueve vueltas”.
Iglesias: “Contentos de haber podido terminar en el puesto 18 en mi debut en el TC junto a Martín (Serrano) y Jonatan (Vázquez). Hicimos una muy buena final desde el inicio. Lamentablemente los inconvenientes en la bomba de nafta tras las primeras vueltas no nos dejaron pelear por terminar entre los ocho o diez primeros, pero fue demasiado pedir para mí, ya que llegamos al final sin cometer errores, con el auto sano y ningún roce importante lo que habla muy bien del buen ritmo que tuvimos y de cómo fuimos manejando la carrera. En mi caso pude disfrutar de manejar una hora peleando en puestos de punta con vueltas menos, sin cometer errores que es muy importante y me da una gran experiencia para pensar en lo que se viene”.