El primer sampedrino condenado por represor
Con el veredicto que condenó a prisión perpetua a los represores Luis Abelardo Patti y Reynaldo Bignone, el sampedrino ex Comisario de Escobar Juan Fernando Meneghini recibió seis años de cárcel en el marco de los juicios por delitos de lesa humanidad. Los querellantes apelarán en su caso. Los jueces consideraron que no había elementos suficientes para probar los tormentos y homicidios. Fue condenado por privación ilegítima de la libertad.
El policía sampedrino Juan Fernando Meneghini fue condenado el jueves pasado en el marco de los juicios por delitos de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura. Compartía el banquillo de los acusados con Luis Abelardo Patti, Reynaldo Bignone, Santiago Riveros y Martín Rodríguez. Todos ellos recibieron prisión perpetua. Meneghini, sólo seis años.
El sampedrino, el primer vecino local condenado por este tipo de delitos, se desempeñó como titular de la comisaría primera de Escobar durante 1976 y 1979. Allí operaba Patti, que era subordinado de Meneghini. Todos dependían de Campo de Mayo.
Los jueces María Lucía Cassain, Lucila Larrandart y Horacio Segretti, integrantes del Tribunal Federal N° 1 de San Martín, dieron a conocer el veredicto el jueves pasado, ante una multitud que asistió a la sala ubicada en la localidad de José León Suárez, en cuya puerta Los Auténticos Decadentes brindaron un show.
Las acusaciones que pesaban sobre los ahora condenados tienen que ver con detenciones ilegales, aplicación de torturas, homicidio y desaparición forzada de personas en los casos de Gastón Roberto José Gonçalves secuestrado el 24 de marzo de 1976 y cuyo cuerpo fue hallado carbonizado días después; el Diputado Diego Muñiz Barreto y Juan José Fernández, secuestrados el 16 de febrero de 1977 (Fernández sobrevivió y fue testigo clave); y los de Carlos Daniel Souto, Guillermo David y Luis Rodolfo D’Amico, en 1976; y Osvaldo Tomás Ariosti, en 1978.
Al momento de dar a conocer el veredicto, Meneghini fue el único que permaneció en la sala. Su condena fue de seis años de prisión efectiva en un establecimiento del Servicio Penitenciario Federal, lo que revocó la prisión domiciliaria de la que gozaba.
Su condena es “por los delitos de privación ilegítima de la libertad agravada por el empleo de violencia y amenazas”. El Tribunal consideró que los elementos obrantes en el expediente no eran suficientes para probar su participación en los homicidios y tormentos.
Los querellantes adelantaron que, luego de que se conozcan los fundamentos de la sentencia el próximo 5 de mayo, van a evaluar la posibilidad de apelar por el caso del ex comisario.
Juan Fernando Meneghini es sampedrino de nacimiento. Hoy tiene 75 años. Sus padres son Fernando Juan Policarpo Meneghini y Herminia Constantín, reconocidos vecinos de la ciudad. El ex Comisario de Escobar forjó su vida en San Pedro, donde formó una familia, con esposa e hijas.
Aquí vivía durante 1976 y 1979, los años de la dictadura en la que estuvo a cargo de una comisaría donde se cometieron aberrantes delitos probados durante el juicio y cuya responsabilidad fue cargada especialmente contra Patti y Bignonone, subordinado y superior de Meneghini respectivamente.
El condenado dejó San Pedro en los años 80 y ahora tenía domicilio en la calle Mariano al 7.868 de la ciudad de Mar del Plata. De aquí se fue envuelto en un escándalo por un caso de poligamia que lo involucraría, ya que se habla de que tendría otra esposa e hijos, además de la que tenía aquí, donde venía los fines de semana.
El Dr. Héctor Antonio Acosta fue el abogado encargado de ejercer su defensa. Su consejo fue que declarara durante el proceso. Fue el único, y negó todos los cargos e incluso su condición de superior de Patti.
En su declaración cargó las responsabilidades en el Ejército, puesto que la comisaría que comandaba dependía de esa fuerza. Los detenidos que llegaban a esa dependencia policial, donde eran torturados antes de ser destinados al centro de detención “El Campito”, en Campo de Mayo.
Durante los alegatos de los querellantes, Meneghini fue fuertemente acusado. El abogado de Madres de Plaza de Mayo Pablo Llonto señaló que las víctimas fueron “víctimas de un genocidio”.
“En el caso de Patti y Meneghini pretendían llevar a su territorio esta limpieza absoluta, y focalizarla en el territorio de Escobar y Garín”, indicó el abogado y pidió que se contemplara la figura de “genocidio”.
“Hubo un circuito que comenzaba en la comisaría de Escobar o Garín (a cargo del sampedrino), seguía en la Unidad Regional y terminaba en Campo de Mayo, como le pasó a Muñiz Barreto.
Allí se decidía el destino final del secuestrado o a veces en la misma comisaría, como les ocurrió a Goncalvez y los hermanos D Amico”, señaló Llonto.