El Hogar Gomendio “no va a cerrar” pero se va a “transformar”
La congregación de las Hermanas Ángeles Custodios deja la institución a fin de año y el Obispado “está haciendo gestiones” para que otra se haga cargo. Las dificultades económicas y el aporte exiguo que hace el Estado por cada chico judicializado forman parte del debate. Habrá una “reestructuración” desde el año que viene. El Obispo Santiago habló del tema en exclusiva con La Opinión.
Desde hace unos días corre en la ciudad el rumor de que el Hogar de Niñas María A. de Gomendio “va a cerrar a fin de año”. En la comunidad religiosa, sobre todo la más cercana y que trabaja activamente en esa institución, la versión cayó como un balde de agua fría. Sin confirmación alguna, la incertidumbre reinó hasta que el sacerdote Héctor Molfesa emitió un comunicado y el propio Obispo, Hugo Santiago, envió tranquilidad.
“Lo que yo les puedo decir sobre el Hogar es lo siguiente: que las Hermanas Ángeles Custodios dejan el Hogar a fin de año”, informó a sus fieles Molfesa, a través de un mensaje de WhatsApp que el jueves por la noche se viralizó rápidamente.
El párroco reconoció que "es muy difícil encontrar Hermanas que vengan”.
“Los gastos fijos del Hogar se fueron a las nubes, como en todo hogar y familia. Las cargas sociales se elevaron sobre todo los recursos”, explicó el sacerdote sobre la realidad económica que atraviesa el hogar.
El grupo de jóvenes que trabaja en la comunidad religiosa vinculada al María de Gomendio envió emisarios a San Nicolás para hablar con el Obispado. Allí dejaron una carta y recibieron el compromiso de una respuesta, que llegó el viernes.
En la misiva, el Obispo Santiago sostuvo lo mismo que informó Molfesa: que la institución no va a cerrar y que están haciendo gestiones para que otra congregación reemplace a las Hermanas Ángeles Custodios.
La Opinión intentó hablar con la Hermana Mónica, para desalentar las versiones y disipar con la voz oficial la incertidumbre entre quienes se desempeñan y especialmente de quienes están tuteladas en el hogar. Una vez más, la titular de la institución prefirió no ofrecer declaraciones a este medio.
El viernes, el Obispo Hugo Santiago estuvo en la localidad de Gobernador Castro, el pueblo histórico de Vuelta de Obligado y el paraje Tablas, donde mantuvo un contacto directo con los fieles.
En diálogo con La Opinión, se refirió a la situación del Hogar Gomendio. “Hace más de un año, la general de las Hermanas Ángeles Custodios vino a hablarme al Obispado para avisarme que se iban por falta de vocaciones y me envió una carta donde concretamente me decía que iban a estar hasta diciembre, a más tardar hasta enero”, informó.
El Obispo buscó llevar tranquilidad a la comunidad: “No es como se dice, que se va a cerrar, sino que va a tener una pequeña transformación. Tal vez como una cosa más chica, pero va a continuar”, aseguró.
Santiago explicó que mantuvieron contacto con una congregación religiosa que, si bien no dio una respuesta oficial, puede que sea la que se haga cargo el año que viene. “Si no vienen las hermanas en 2019 o si vienen a mediados de año, estamos buscando una persona especializada que nos ayude como moderadora, en eso estamos”, precisó.
La máxima autoridad religiosa de la región reconoció que hay “un problema administrativo bastante importante”, en relación a la falta de recursos para sostener la institución.
“Del campo Gomendio el dinero se gasta absolutamente ahí y no nos alcanza ni cerca, antiguamente nos alcanzaba para los sueldos de todo el año, ahora llegamos a mitad de año y no alcanza, hay que conseguir de otro lado”, explicó. “El hogar va a seguir, más pequeño, pero va a seguir”, reafirmó el Obispo.
La institución cuenta con 10 empleados, lo que implica alrededor de 125.000 pesos al mes. En la diócesis hablan de “reestructuración y reformulación” del Hogar Gomendio, que incluye una nueva congregación pero también la posibilidad de que la Iglesia plantee al gobierno provincial su decisión de mantener el hogar de día.
En el Hogar María de Gomendio, en la actualidad, hay alrededor de 30 menores de edad, sin contar los del Centro de Día. Esta institución es una de las que recibe a niños que, judicializados por diversas situaciones, están bajo “medida de abrigo” que los aleja de sus padres y familia próxima, incluso hasta el momento de adopción.
El asilo para menores judicializados es parte del debate. El Estado aporta alrededor de 2.500 pesos por cada uno, lo que, aseguran desde la comunidad religiosa, no alcanza. Si no hubiera un espacio institucional como este, la Provincia de Buenos Aires debería generar las condiciones para que esos chicos permanezcan en otro sitio mientras dure la “medida de abrigo” de la que son protagonistas.
El domingo, la institución abrió sus puertas para una kermese que estaba planificada desde antes de que tomara estado público la situación de las Hermanas Ángeles Custodios.
La tercera edición de la kermese “Aleteando sueños”, que propone acercarse a la institución para disfrutar de una tarde de juegos, tuvo una muy buena convocatoria, en procura de “ayudar en el sostenimiento de la histórica institución sampedrina que tiene a su resguardo a menores de edad que por diversas situaciones no pueden permanecer junto a sus familias”.
Desde el mediodía y hasta la tardecita, el hogar ofreció juegos tradicionales para chicos, una interesante feria de emprendedores, talleres de percusión, porcelana fría y plástica; cantina y también espectáculos infantiles.