Otra vez, la policía detuvo al reconocido delincuente Marcelo Sotelo, alias “El Gordo”, de 28 años y vecino del barrio Hermano Indio, donde sus andanzas son muchas y todas están relacionadas con hechos delictivos. Esta vez cayó por una causa de intento de homicidio.
Sotelo fue detenido en el barrio El Piojillo de la localidad de Río Tala, en la vía pública. La policía lo buscaba con una orden de detención emanada el mismo jueves por el Juzgado de Garantías Nº 3 que conduce María Eugenia Maiztegui en San Nicolás.
“El Gordo” estaba en libertad, a pesar de que durante la madrugada del 16 de febrero lo habían detenido luego de que entrara a robar con un cómplice a una vivienda de Lavalle al 3200, de donde escapó en moto y hasta tiroteó a la policía, sin herir a los agentes, cuando intentaba fugarse para evitar ser detenido.
A los pocos días fue liberado por orden de la Justicia. En las redes sociales, sus familiares y amigos celebraban su regreso al barrio Hermano Indio, desde donde lidera uno de los grupos que en la zona mantienen enfrentamientos constantes que incluyen disparos de arma de fuego.
Marcelo Sotelo quedó detenido a disposición de la Justicia en el marco de una causa caratulada “homicidio en grado de tentativa” cuyo hecho ocurrió a principios del año 2017, en el marco de uno de esos conflictos vecinales.
Sotelo tenía una enemistad manifiesta con un joven menor de edad que estaba relacionado con la venta de drogas y cuya madre enfrenta causas penales acusada de ser “la transa del barrio”, a quien otro joven, apodado “El Guasón”, apuñaló en el marco de una pelea de la que participaron los tres.
Ads
