El frío mató a los peces
Los episodios de mortandad de las especies fueron como consecuencia de las bajas temperaturas del agua en los meses de julio y agosto. El fenómeno se registro en nuestras costas y en otros sectores del litoral. De los estudios de laboratorio obtenidos no se observan otras alteraciones.
Varios episodios de mortandad de peces ocurrieron durante los meses de julio y agosto en varios sitios fluviales de distintas Provincias tales como Buenos Aires (La Plata, Puerto Madero, Martín García), San Nicolás, Ramallo, San Pedro, Baradero, Entre Ríos (Gualeguaychú, Salto Grande, Federación, Victoria), Santa Fé (Rosario) y Santiago del Estero (Embalse de Río Hondo), entre otras. Un comunicado de la Prefectura Local explica que de las especies involucradas, el sábalo es la especie con mayor afectación, siendo en general los ejemplares juveniles los que suman las mayorías de las muertes. A título ilustrativo y acorde a bibliografía consultada, la temperatura óptima para el sábalo se halla comprendida entre los 19ºC y los 23ºC, a medida que disminuye la temperatura, los peces se muestran inactivos, luego se manifiesta una detención del movimiento y posteriormente se colocan de costado sobre su flanco o dorso hasta que se produce la muerte.
En general, las bajas temperaturas producen una disminución en las defensas del animal permitiendo que agentes agresores como virus y bacterias terminen provocando la muerte de los peces.
Se estima que las temperaturas descendieron sobre la media esperada para esta época. De las observaciones y estudios de laboratorio obtenidos hasta el momento, no se observan otras alteraciones o anomalías en el medio acuático que puedan relacionarse con estos eventos.