El estado local al servicio del negocio de Toughman
Con logística de la Dirección de Deportes, la franquicia internacional realizó el domingo una prueba en la ciudad con una mala organización en la que se excluyeron cuestiones básicas de seguridad. La clasificación general la lideró Nicolás Rosenbaum.
Es gratificante que San Pedro reciba eventos deportivos de gran magnitud, más aún de una franquicia internacional como Toughman que realiza pruebas de triatlón en todo el mundo y se fijó por intermedio de Paulo Galizia en las bondades de la ciudad.
Sin embargo, la organización estuvo lejos de dar la talla y la Dirección de Deportes que conduce Luis María Rodríguez fue cómplice y quedó expuesta a cualquier contratiempo que hubiese surgido. Desde el vamos, fue Rodríguez y no la empresa la que presentó en una conferencia de prensa en la Dirección de Turismo el evento junto a otras actividades de Semana Santa.
El área que él dirige colaboró con Toughman en la logística. “La Municipalidad no pone absolutamente nada de dinero para el evento, todo el personal que trabajará el domingo es a cargo de la empresa organizadora. Hay también muchos voluntarios. Desde el municipio se apoya y colabora en la logística entre otras cosas. A San Pedro le favorece este evento ya que gran parte de los lugares de alojamiento están reservados por atletas y acompañantes de estos”, explicó Rodríguez a La Opinión días previos a la competencia.
El estado local se puso a disposición de Galizia. Declaró el “Half Toughman Argentina San Pedro” como de interés municipal y, según consta en el decreto, le garantizó, a cambio de casi 16.500 pesos, el servicio de policía adicional. También fue necesario cortar la circulación vehicular en calles y la ruta 1.001 entre las 6.00 y 14.00 del domingo para la prueba que contó con 120 inscriptos que abonaron cada uno 250 dólares, es decir, más de 5 mil pesos.
Rodríguez también le consiguió a Toughman las instalaciones de Náutico para desarrollar los 1900 metros de natación e instalar el parque cerrado de bicicletas. Fue en el agua donde la marca mundial se ahogó. La carrera inició a las 6.30 sin Prefectura más un sólo guardavida (en pruebas que incluyen espejos de agua se exige uno cada diez o quince deportistas) y dos embarcaciones de apoyo que dispuso el Celeste a último momento con empleados propios ante la idiosincracia de Galizia.
Sin la fuerza de seguridad que tiene potestad en el río, el club pasó a ser responsable de cualquier acontecimiento que suceda en su dársena durante el tramo de natación. En ningún momento los directores de deportes de la entidad y de la municipalidad, Guillermo Velázquez y Rodríguez respectivamente, intentaron al menos frenar el comienzo de la prueba a pesar de las graves irregularidades calificadas como “una locura” por el ambiente local. Incluso, una atleta se lanzó a nadar pero se arrepintió ante la falta de medidas de seguridad y, después de reintentar, abandonó.
En los 90 kilómetros de ciclismo hubo fallas pero, a esa altura, menores. El recorrido fue desde Náutico hacia un circuito diagramado en la ruta 1001 hasta Río Tala. Durante ese lapso, la vía estuvo cerrada. Luego de dejar el rodado en el parque cerrado, los competidores se lanzaron a correr los 20 mil metros en un trayecto emplazado entre la costanera y la zona de barrancas. Quien lideraba hasta ese momento la carrera en vez de subir por el camino ubicado frente a Náutico siguió de largo hasta Mansa Lyfe porque el recorrido no estaba señalizado.
El ganador fue Nicolás Rosenbaum con 4 horas 7 minutos 8 segundos seguido de Lucas Antonetti (+46 segundos) y Diego Lapola (+2:02). Entre los 120 competidores hubo tres sampedrinos. Marcos Corvino llegó 17° (4 horas 22 minutos 43 segundos), Daniel Artigues lo hizo 51° (4 horas 53 minutos 45 segundos) y Rosendo Arias 112° (6 horas 15 minutos 52 segundos). Entre las damas ganó Carla Iannarelli (4 horas 39 minutos 12 segundos) antes
que Carolina Cardozo (+10:51) y María Inés Villaverde (+21:06).
Toughman usó a San Pedro y, más precisamente, a la Dirección de Deportes para llevarse todos los beneficios económicos. Rodríguez, que colaboró el día de la prueba, expuso su área municipal al negocio privado sin rédito alguno y hasta podría haber ligado un sinfín de problemas si hubiese surgido algún imponderable, sobre todo en natación. Lo curioso es que cuando clubes o emprendedores de San Pedro organizan un triatlón o aguas abiertas, la Municipalidad exige cumplir los requisitos a rajatablas, sobre todo la notificación a Prefectura.
Una pregunta desafortunada
Desde su página de Facebook Toughman Argentina publicó el martes un video en el que tres triatletas dijeron no muy convencidos que la organización “estuvo bien”. Sin embargo, los muchos comentarios, entre ellos de atletas, fueron duras críticas a la organización de Paulo Galizia y el sinfín de irregularidades que hubo.
Claro está que Toughman no conformó a casi nadie durante su paso por San Pedro y si la prueba fue fructífera deportivamente fue por la predisposición de los atletas y de quienes ayudaron desde afuera.