El Concejo aprobará la moratoria para que el Ejecutivo pague los sueldos
El martes, las comisiones dictaminaron a favor, tras el reclamo del Ejecutivo en la reunión de Comité de Crisis. Borgo reconoció allí que no podrán pagarles a los empleados en la fecha que corresponde y los sindicatos anunciaron que, en ese caso, harán paro hasta cobrar. Marelli y Acosta recibieron apoyo provincial. La Sociedad Rural cuestionó a todos.
El Gobierno municipal reconoció que en septiembre tampoco podrá pagar los sueldos en tiempo y forma, por lo que en diez días habrá un nuevo paro de trabajadores municipales y profesionales de la salud. La semana pasada depositaron las horas extras y el martes hicieron lo propio con las guardias médicas, para descomprimir, pero durará poco.
Ayer por la mañana, las comisiones del Concejo Deliberante dictaminaron el expediente de la moratoria, algo que el Ejecutivo reclama desde hace meses y que, según los cálculos del Secretario de Economía Roberto Borgo, permitiría recuperar unos 7.000.000 de pesos, aunque no de manera inmediata.
La segunda reunión del Comité de Crisis creado por el HCD fue el jueves por la tarde/noche, al otro día de una dura audiencia entre funcionarios del gabinete y sindicalistas, quienes salieron del Ministerio de Trabajo con las manos vacías.
“No tienen respuestas para las demandas que planteamos”, fue la respuesta a coro de los cuatro sindicatos, que pusieron en la mesa de debate tres temas fundamentales: el cumplimiento del acta firmada a principios de año; el pago en tiempo y forma; y la discusión sobre un incremento salarial antes de fin de año.
En la reunión del Comité de Crisis hubo detalles al respecto. Allí estaban los ediles de cada bloque, el presidente del HCD, los secretarios Borgo, Bianchi, Ojea y Cheyllada, y los representantes sindicales, con las cuatro cabezas presentes: Marelli, Acosta, Kasta y Parzon.
Un intercambio tenso
“Nos dijiste que el mes que viene va a ser peor”, le reclamó el titular de Ate a Borgo y le aseguró: “Va a haber reclamos al municipio por los intereses de la Visa”, afectados por el retraso en el pago de los salarios. “Queremos saber dónde está la plata”, espetó el sindicalista.
“El municipio no hace frente a las obligaciones porque no tiene los recursos”, explicó Borgo y reconoció que en septiembre habrá dificultades para pagar en tiempo y forma.
Dijo que en total, la masa salarial representa 15 millones de pesos, incluidas horas extras, guardias y cargas sociales, y que además hay que contar otros “cinco millones de funcionamiento operativo”. Tras exponer los números, señaló: “No es que alguien se esté llevando la plata”
Bianchi reclamó por el incremento de tasas sobre el que habían hablado a fines del año pasado, cuando acordaron un aumento del 40 por ciento, en lugar del 80 que había propuesto el Ejecutivo. “No es que estamos planteando un impuestazo, pero esto hay que decirlo y discutirlo”, dijo.
Al reclamo por el incremento de tasas se sumó una vez más el de la moratoria, pero también el proyecto de tomar un crédito que expusieron verbalmente a principios de año y que nunca avanzó.
“Habíamos planteado la posibilidad de salir a tomar alguna línea de crédito y no se dio desde el punto de vista político”, les dijo Borgo, quien graficó: “Algo debe cambiar en esta ecuación: o suben los ingresos o bajan los egresos, no hay magia”.
Los funcionarios del gabinete se comprometieron a enviar información que el Concejo solicitó en la primera reunión. Se trata de datos que La Opinión publicó y que el HCD quiere formalmente. Borgo los envió el lunes. En la reunión les había dicho: “Les paso la información, pero no me pidan que les haga una rendición de cuentas”.
Reclamos gremiales y sociales
El Sindicato Único de Trabajadores Municipales inauguró oficialmente su local de San Martín al 200, donde funcionaba la DDI. Lo hizo con la presencia del Secretario General de la Fesimubo, Rubén Cholo García, quien llegó acompañado por sindicalistas de peso en la región y el conurbano.
García le pidió al intendente “que reflexione” y que “el costo no lo paguen los trabajadores”, al tiempo que se refirió a una “mala administración” por parte de Guacone, con quien se reunió, y se puso a disposición de los empleados municipales sampedrinos.
De la misma manera, el Secretario Gremial de ATE Provincia César Baliña estuvo en el despacho del intendente. “Lamentablemente no hemos tenido una respuesta favorable, sino que todo rondaba en explicarnos en qué situación estaba el municipio y qué estaban haciendo ellos para que se solucione la situación”, informó.
Tanto Baliña de ATE como García de Fesimubo coincidieron en señalar que San Pedro es el único distrito de la provincia que tiene dificultades para pagar en tiempo y forma a sus trabajadores.
De la misma manera, ambos sindicalistas provinciales manifestaron su repudio a la decisión de poner en “disponibilidad absoluta” a todos los empleados, tal como establece el artículo 5 del decreto de emergencia administrativa.
En medio de la crisis y con los reclamos de los trabajadores municipales como eje, la Sociedad Rural emitió un comunicado en el que manifestó su descontento con la situación y apuntó tanto al Intendente como a los concejales.
A estos últimos les dijo: “Por temor, complicidad o incapacidad, muchos no van más allá de la crítica”, y fustigaron al Comité de Crisis: “Una emergencia como la que se pretende tratar” allí” se monitorea diariamente y no una vez por semana”.
Sobre el Intendente, pidieron a la política que encuentre la forma de que dé un paso al costado: “Es la propia Democracia la que debe encontrar mecanismos para transferir temporariamente la posibilidad de tomar decisiones de fondo a quienes se repartieron en proporciones ajustadas la representatividad de todos los sampedrinos”, indicaron.