El cambio también es de figuritas
En diversos organismos nacionales, provinciales y municipales, las autoridades decidieron dejar cesantes o desplazar a profesionales nombrados por el kirchnerismo. En algunos puestos clave, restan nombramientos. Hay quienes hablan de “despidos”, aunque otros aclaran que es “no renovación de contratos”. Todos coinciden en que la política es parte de las decisiones al respecto pero evitan o promueven la palabra “persecución”.
Con frases que resonaron en todo el país, como “hay que sacar la grasa militante” o “está lleno de ñoquis”, los gobiernos de Cambiemos discontinuaron programas, decisión que desembocó en que mucha gente se quedara sin trabajo, sobre todo profesionales de organismos que podían verse en los distritos como San Pedro, donde la ola de “cambio de figuritas” también llegó.
La novedad de la semana fue el desplazamiento del Coordinador del Programa FinEs, creado para terminar la secundaria. El Profesor de Educación Física Ramiro Torresín fue reemplazado por Ana Tiramonti, candidata a concejala del Pro. La salida del hijo de Marta Alonso, quien renunció a su cargo antes de que la removieran, provocó la partida de Néstor Abeledo, el otro coordinador del programa.
Los desplazamientos comenzaron en el Centro de Acceso a la Justicia (CAJ), con la trabajadora social Jimena Rotundo, la abogada Mariángeles Colella y la empleada administrativa Elisa Caña.
También perdió su trabajo Leonardo Regueiro, que estaba hace ocho años en el Ministerio de Justicia y cambió de destino cuando abrió el CAJ. Como no era personal de planta permanente, ese cambio lo perjudicó.
En Educación, además de Alonso y Torresín, fue desplazada la candidata de Pángaro Judit Dusac, quien se desempeñaba como Coordinadora de Políticas Socioeducativas.
Marisol Acevedo sigue como empleada de Anses pero ya no es la Jefa, cargo con el que ingresó al organismo. En la Delegación del Ministerio de Trabajo hay rumores acerca de que Paula Taurizano sería reemplazada, aunque por ahora permanece de licencia por embarazo.
A nivel regional, el abogado pangarista Mauricio Gugger sigue como coordinador de inspecciones, aunque presentó la renuncia y no recibió respuesta. Tenía ocho personas a cargo, de las cuales tres eran sampedrinas, para la tarea de inspección, cuyos contratos no fueron renovados, aunque en ese caso hay algo más que se monitorea.
En el Centro de Referencia del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación renovaron todos los contratos por un año, menos el de la Trabajadora Social Erika Carlsson, quien estaba a cargo hasta la designación de José “Renegado” Franchini.
Carlsson lleva 12 años como profesional contratada en el área que conducía Alicia Kirchner, y su nuevo contrato vence a fin de mes. Todo hace prever que será renovado, teniendo en cuenta su experiencia en el territorio y que, además, está embarazada.
En Inta también hay preocupación. Hay contratos que dependen de la gestión anterior, sobre todo los que llegaron de la mano del coordinador regional Daniel Somma, un experto formado en la prestigiosa Universidad Agraria de Wageningen, Holanda, de alto perfil militante pero de sobrada experiencia profesional.
En el programa Pro Huerta -que lleva adelante desde el territorio Inta, pero depende de Desarrollo Social- hay cuatro profesionales cuyos contratos se terminan a fin de mes y que no saben si seguirán trabajando.
En el Municipio, los despidos que tuvieron un “aroma político” fueron los de los médicos Juan Oberse y Maximiliano Piombetti, quienes estuvieron al frente de los reclamos de la Guardia el año pasado y con antecedentes con los que el nuevo Director del Hospital no estaba dispuesto a convivir.
Los enumerados en esta página son profesionales que fueron designados en cargos y puestos con origen político, sin dudas, al menos en la mayoría de los casos. Sin embargo, en gran parte no se trata específicamente de lugares destinados a la toma de decisiones políticas sino a la labor propia de sus profesiones.
En Cambiemos sostienen que no se trata de “despidos” sino de “no renovación de contratos”, lo que técnicamente es cierto. Por otro lado, también es cierto que las políticas se diseñan para ser ejecutadas en el territorio con el personal que cada Gobierno defina, porque para eso, después de todo, gana las elecciones.
No sucede lo mismo, por ejemplo, en Desarrollo Social de la Municipalidad, donde cada Secretario desde la era Guacone en adelante, no puede elegir su equipo porque en lugar de contratar año a año con la venia del Concejo Deliberante, los profesionales son de planta permanente.
En algunos casos se dirá que, si el Estado ya los formó para la tarea, no es conveniente cambiar a los trabajadores porque cambia la conducción.