El aumento de tasas impactará entre los que más pagan
Los contribuyentes más cumplidores son los que notarán un incremento mayor de las tasas, aprobado la semana pasada en la asamblea de Mayores Contribuyentes. En el debate hubo reclamos porque al considerar la lógica de “que pague más el que más tiene” no se cobra por servicio prestado sino que se utiliza una idea de “justicia fiscal” más acorde a los impuestos. Una guía para estar atentos cuando lleguen las facturas.
El Gobierno de Cecilio Salazar logró la semana pasada, en asamblea de concejales y Mayores Contribuyentes, la aprobación del aumento de tasas para este 2017, con porcentajes que van desde el 35 al 100 por ciento, dependiendo de cada gravamen.
El oficialismo tenía sus diez votos, los dos de Patricia Rocca y Dalmy Butti, por lo que necesitaba siete de los Mayores Contribuyentes, número que logró con lo justo y no sin rosca previa para garantizar las 19 manos levantadas necesarias. Los teléfonos sonaron hasta casi las13.00, hora prevista para la reunión en el Salón Dorado.
Durante la sesión hubo presencia de militantes del PJ que levantaron unas 400 firmas contra el aumento y de referentes del Sindicato de Municipales que conduce Juan Cruz Acosta, acompañados de empleados y “decretos” del Corralón, que protagonizaron un entredicho con el concejal Quintana (ver recuadro).
ABL, 50 %
La tasa de Alumbrado, Barrido y Limpieza (ABL) tiene unpromedio de aumento del 50 por ciento. Se trata de un gravamen deficitario, sobre todo por el costo del servicio que presta Ashira, una empresa contratada a través de un convenio directo de emergencia luego de que quedara desierta la licitación a la que se había presentado como único oferente pero con un costo mucho mayor al del pliego.
El alumbrado de máxima intensidad, que el año pasado estaba en $126,40 pasó ahora a 189,60; la recolección de residuos de servicio especial, de $285,60 a $428,40; el barrido manual de calle pasó de $96 a $144; y la conservación de vía pública, de 8 a 12 pesos.
Es decir que una casa en el centro que en 2015 pagaba 250 pesos y en 2016 pasó a pagar $516 deberá abonar ahora 774 pesos por bimestre, lo que suma 4.664 pesos al año.
Para que cada vecino pueda sacar su propia cuenta: el alumbrado en bocacalle y mitad de cuadra cuesta ahora 108,75 pesos; solo en bocacalle, $33,15; la recolección de residuos normal, es decir de tres veces por semana, $357; el barrido mecánico tiene un valor de 120 pesos por bimestre; para las calles de tierra el riego se cobra $22,50.
En la zona periférica todo es más caro: la conservación de la vía pública cuesta 123 pesos por cuota; en las delegaciones, $40,50.
A esos montos hay que sumarles el cinco por ciento de sobretasa del Fondo de Seguridad. Además, para calcular cuánto pagan los comercios e industrias debe multiplicarse por 1,4 cada uno de esos valores, que corresponden a un frente de 10 metros.
Red vial, 50 %
Los cumplidores de la zona rural que pagan la tasa por reparación y mantenimiento de la red vial –históricamente la de mejor porcentaje de cobrabilidad– pagarán este año un 50 por ciento más.
Serán 174 pesos por hectárea, con una superficie mínima a liquidar de tres. Hay descuento del 50 % para zonas anegadizas y un monto de 675 pesos por “unidad parcelaria por trimestre”, concepto que motivó quejas de barrios cerrados como el Apart Club San Pedro, cuyos propietarios consideraron “inequitativo” el sistema de cobro, que no fue modificado.
Servicios Sanitarios, de 0 a 100 %
El incremento del año pasado, que no fue sólo porcentaje de aumento sino que además implicó una modificación de la base imponible, llevóla cuota mínima anual por los servicios de agua corriente y desagües cloacales a 1200 pesos cada uno, es decir 400 por bimestre.
Este año, el Gobierno decidió que el aumento sea escalonado según la valuación fiscal de la propiedad, algo que despertó quejas porque la concepción con la que justificaron esa lógica desde el Ejecutivo está más ligada a los impuestos que a las tasas. “Si en mi casa prestan el mismo servicio que en otra cuyo valor fiscal es más bajo porque está en otro barrio, ¿por qué me cobrarían más?”, se preguntó un contribuyente avezado en el análisis.
Es que de acuerdo a lo que fue aprobado el jueves pasado, quienes tengan una propiedad con valuación de Arba menor a 50 mil pesos no pagarán aumento. En sesión, el concejal oficialista Iván Paz explicó que de 17 mil cuentas que pagan servicios sanitarios, unas 8 mil no sufrirán aumento y otras mil son las únicas que pagarán la suba del 100 por ciento.
Si la valuación fiscal va de 50.001 a 100.000 pesos, el servicio de agua corriente residencial y de desagües cloacales costará $1.620 al año cada uno, es decir 3.240 pesos distribuidos en seis cuotas de $540.
Unos 2.160 pesos saldrá el agua para los servicios comerciales y 2.700 para las industrias. El desagüe cloacal costará para ambos 2.160 pesos.
Si la valuación fiscal va de los 100.001 pesos a los 200 mil, servicios sanitarios cuesta 4.080 pesos al año, es decir seis cuotas bimestrales de 680 pesos.
Si la propiedad supera los 200 mil pesos de valuación provincial oficial, el costo anual es de 4.800 pesos, seis cuotas de $800
Los comercios pagarán 3.200 de agua y 3.200 de cloacas. Las industrias, además, 4 mil de agua.
Aquellos que más pagan tienen la posibilidad de solicitar un medidor domiciliario, cuya instalación tiene un costo de 2.979,47 pesos. La tarifa mínima básica para este servicio es de 200 pesos hasta 1000 litros por bimestre, más 324 pesos de cloacas (o el 62 % del total consumido).
A todo ello hay que sumarle el 5 por ciento de sobretasa del fondo de seguridad pública.
Seguridad e higiene, siempre polémica
La tasa que grava la actividad comercial e industrial para brindar una presunta contraprestación que implica inspecciones periódicas sufrirá algunos aumentos directos y otros indirectos, aunque llamativamente no hay un incremento en lo que tributan ciertas actividades que han visto aumentar los precios de sus productos de manera ostensible.
El Gobierno mantuvo los parámetros de tributación respecto a la base imponible por cantidad de personal empleado y sobre ingresos brutos para los contribuyentes que hayan facturado más de 20 millones en el ejercicio 2016, al igual que las alícuotas.
Aun así, en el Concejo Deliberante la oposición planteó que debería haberse aumentado el piso de facturación, puesto que los costos de insumos aumentaron mucho, al igual que los precios de venta final, y hay casos en los que la alícuota representaun porcentaje muy elevado respecto de la rentabilidad posible del negocio en cuestión.
La tabla de montos de los anticipos para el primer trimestre de 2017 para quienes hayan facturado menos de 20 millones y tengan menos de 40 empleados quedó conformada de la siguiente manera:
Sin empleados paga 1.569,32 pesos la primera cuota; de uno a tres, $1.961,65; de cuatro a seis personas registradas, $2.941,48; de siete a diez, $4.904,13; de 11 a 20, $7.846,61; de 21 a 30, $14.712,39; y de 31 a 40 empleados pagará como primer anticipo unos 17.654,87 pesos.
Respecto de los mínimos especiales, sólo habrá aumento para bancos y entidades financieras, que pasarán de 45 mil pesos a 60.750 por mes. El resto quedará igual que el año pasado.
Confiterías bailables y bares con actividad nocturna, pubs o similares seguirán pagando 9 mil pesos mensuales; los hoteles por hora, $4.500; los locales de intermediación y otros servicios financieros, $15 mil; las areneras, 30 mil pesos por mes.
> “El Municipio necesita recursos”
Así lo aseguró el Secretario de Economía, Mario Sánchez Negrete, el sábado en Sin Galera, luego de la sesión.
“Todo el ingreso que hubo se devolvió al vecino en obras. Por eso se decidió aumentar tasas”, señaló y reafirmó la idea de que quienes más pagarán son “quienes tienen mayor poder adquisitivo”.
> Aprietes, amenazas y armas
El concejal Quintana dijo en sesión que un sindicalista había ido a “visitarlo” para que “consultara con la almohada” su anticipada decisión de votar en contra del aumento. Cuando lo dijo, Raúl “Chipi” Benítez, Secretario Adjunto de la organización sindical que conduce Juan Cruz Acosta, gritó: “No queremos volver a la era Guacone, cuando no había para pagar los sueldos”.
El propio Benítez se había ocupado de “visitar” a quienes habían adelantado que votarían en contra y que ya lo habían hecho así en la sesión preparatoria. Luego se ocupó de decir que no había habido “apriete” ni “amenazas”, aunque quienes conocen sus modos pueden imaginar cómo se dirigió hacia el edil.
Además, Quintana dijo que “había gente armada” en la sesión y pidió más seguridad para otras oportunidades similares.
> Voto a voto
De los 18 concejales, sólo faltó Ramanzini, que votaba en contra pero pidió licencia “por razones de índole personal”, sin que susuplente, Renato Blasconi, asumiera.
La votación fue como se esperaba: 12 a 5. Paz, Franco, Pelletier, Neyra, Maroli, Rosa, Otero, Barbieri, Garavaglia y Ferraro votaron a favor, junto con Rocca y Butti. En contra lo hicieron Tirelli, Quintana, Trelles, Sánchez y Mosquera.
Hubo apenas 13 de 17 mayores contribuyentes titulares. Cuatro presentaron nota de excusa: Ricardo Giallorenzi, Carlos Jaime, Agustín Olivera y Gustavo Calvet. Del resto, siete votaron a favor y seis en contra. Los primeros fueron Omar Riolfo, Iván Juan Bennazar, Ernesto Gordillo, Eduardo Birador, Sergio Ferragut, Roberto Taurizano y Adrián Rodríguez.
Adriana Fanelli, Juan Gutiérrez y Eduardo Descalzo no sólo se opusieron sino que además tomaron la palabra para argumentar su negativa. También votaron en contra Alberico Cabrera, Roque Díaz y Graciela Borda.