El anhelo de Kevin Espíndola: Pelear en San Pedro y por la televisión nacional
El sueño de que el púgil se presente en el gimnasio del Estadio Municipal requiere una inversión de alrededor de 400 mil pesos que está lejos del alcance de Banfield y quienes lo rodean. Sin embargo, su equipo trabaja para concretarlo porque es el próximo paso que deben dar en el afán de devolverlo a la elite nacional.
Kevin Espíndola regresó al boxeo en 2019 con el firme objetivo de llegar, otra vez, al plano nacional que lo tuvo cuando fue parte de Los Cóndores en la World Series Boxing de la Asociación Internacional Amateur (AIBA) y en los Juegos Olímpicos de la Juventud Nanjing, China, 2014. Banfield lo acobijó con los entrenadores José Cancelo e Ismael Ibarrola y el equipo lo completó el preparador físico Andrés Villarruel quien trabaja con Matías Erbin, de los mejores en la materia a nivel nacional y con trayectoria en el plano internacional quien entrena talentos como Brian Castaño y Fabián Maidana, hermano del "Chino". Años atrás también lo hizo con el campeón mundial Lucas Matthysse.
Desde que volvió a subirse al ring, en su mayoría al del gimnasio del Estadio Municipal, Espíndola logró resultados positivos y de a poco va escalando peldaños. Por eso, su equipo va planteando nuevos objetivos que le permitan subir en la consideración y lograr pelear por el título argentino de los pesados. Mientras tanto, el humilde púgil entrena y entrena y el gran anhelo de él y sus asistentes es que su próximo combate sea en San Pedro y por la televisión nacional.
¿Qué se necesita para que la pantalla chica transmita a Kevin Espíndola? Dinero. Según pudo saber La Opinión, con alrededor de 400 mil pesos algún promotor puede armar el evento en el gimnasio municipal y que se televise por TyC Sports, canal que los viernes por la noche suele mostrar veladas en diferentes puntos país con periodistas especializados en la materia. El cachet cubre la seguridad, el seguro y la bolsa de los deportistas; y la estadía de veinte personas que trabajan en la jornada, entre ellos la producción de la TV.
Generalmente, se programan cuatro peleas profesionales de las cuáles una es por un título y la idea inicial es que el sampedrino se presente en la de fondo aunque para ello debería aceptar el reto el campeón argentino. De lo contrario, luchará por una corona vacante.
Para el Taladro, por su realidad, es impensado recaudar e invertir alrededor de 400 mil pesos para que su púgil sea observado en todo el país. El dinero debería surgir desde otro sector, sea privado o estatal, y llevar a cabo una promoción de alto vuelo para recuperarlo con la venta de entradas, publicidades y cantina. El sueño está y el equipo de Espíndola trabaja para concretarlo porque, bien saben, es el próximo paso que debe dar su pupilo en su afán de regresar al primer plano nacional.