Sin las luces de otras disciplinas el ajedrez también tuvo su hito en los Juegos Bonaerenses 2019 porque gracias a Feliciano Mozzi y Sasha Medina cortó una racha de “más de diez años” sin representantes de San Pedro en la Etapa Final en Mar del Plata, dato que enfatizó el entrenador de los jóvenes, Diego Domínguez, en una entrevista con La Opinión el primer día de actividades en el estadio José María Minella.
“Esto es el inicio, hemos traído dos representantes en ajedrez que hacía más de diez años no teníamos representantes. En el Centro Cultural y en Villa Igoillo estamos haciendo un gran trabajo con el profesor Matías (Tarragó) y tenemos expectativas de traer muchos más representantes el año que viene”, sostuvo quien da clases en el Centro Cultural Abelardo Castillo en el marco del programa Animate Vos Vales.
Feliciano es todo un personaje. En cada partida la capucha de la campera verde de San Pedro cubrió su cabeza y terminó séptimo en la general en la categoría U18. El chico se considera “muy vago” y por eso aseguró que se preparó “mal”. “Es la primera vez que vengo y es toda una experiencia. Me gusta entrenar, no estudiar. En la escuela tengo promedio 9.5 pero no estudio. Eso me sirve para mi desempeño”, contó quien, según Domínguez, tiene “una inteligencia superior a la media”.
Además, su profesor se refirió a sus inicios en la disciplina y recalcó que la conoció a través de su hermano Valentino: “Jugó en sus inicios en la Sociedad Italiana con el profesor Hugo Alonso. El año pasado me contacto a mí y comenzó a tomar clases particulares conmigo. Lo lleve a varios torneos y fue tomando experiencia. Es alumno desde la primera clase del Centro Cultural Abelardo Castillo y pese a su adolescencia con 17 años es tranquilo”.
Mozzi sabe tocar varios instrumentos como la guitarra y el piano, características que hablan de su capacidad que también usa para el ajedrez en el que, según la opinión de Diego Domínguez, “si estudiaría un poco más” sería “un futuro campeón” porque tiene “mucho potencial”.
A Sasha, que terminó undécima en U14, no le gustan las fotos y rechaza cada pedido, siempre con su sonrisa y tranquilidad característica. Aunque empezó en el Centro Cultural Abelardo Castillo, hace un par de meses toma clases con Matías Tarragó en la Comisión de Fomento de Villa Igoillo. También, juega al fútbol en Paraná y es aficionada al vóley.
Tanto Feliciano como Sasha llegaron a la ciudad balnearia con la ilusión de, además de divertirse, subirse a un podio, objetivo que no lograron pero sí cortar un largo período sin ajedrecistas en la Etapa Final de los Juegos Bonaerenses, un logro que puede abrir puertas a otros colegas en años futuros.