Dos juicios por Triquinosis
Antes de que caiga el telón del año judicial se presentarían dos demandas concretas contra los responsables del brote de Triquinosis que dejó secuelas en familias completas que enfermaron al consumir chacinados en malas condiciones. El destinatario inicial será el gobierno provincial sobre el que recae la principal responsabilidad de control, pero algunos quieren incluir a la Municipalidad.
Por lo menos dos estudios jurídicos muy importantes de San Pedro están al filo de realizar presentaciones judiciales con reclamos suculentos ante el daño ocasionado a un grupo vecinos por la venta de factura de cerdo contaminada con triquina.
A cuatro meses del pico de la polémica que alcanzó ribetes importantes, los que efectivamente se enfermaron y sufrieron las consecuencias físicas y particulares del mal, siguieron adelante con el análisis de la viabilidad de una acción judicial.
Es posible que a los dos grupos que reúnen en total a unas 50 personas se le sume un tercero con menos casos, pero todos coinciden en al menos un destinatario de la demanda: el gobierno de la provincia de Buenos Aires.
Hacerle un juicio al Estado Provincial no es una acción rápida ni expeditiva pero con la enfermedad probada a cuestas y la responsabilidad de control específica que tiene una dirección dependiente de ese gobierno, las probabilidades de una pelea sostenida son concretas.
Así lo han evaluado los abogados que estudian los casos y reúnen toda la documentación posible para sustentar la demanda que también se orientaría hacia el comercio que supuestamente vendió los productos donde supuestamente se originó el brote.
¿Y la Municipalidad?
En el Estudio de la Dra. Marisa López Bravo la información suministrada hasta el momento ha sido poca, pero el municipio estaría dentro de los “blancos” a incluir considerando que también existió alguna negligencia en el control local, apuntando a la Dirección de Bromatología. Una postura distinta es la que tiene el Estudio del Dr. Miguel Adeff, en donde uno de sus integrantes, el Dr. Sergio Ocampo está presentando una acción en la que además es parte, porque él también se contagió de Triquinosis. Desde que se supo que en el estudio del Asesor Letrado de la Municipalidad se estaba gestando una demanda de este calibre aparecieron dudas acerca de lo que ocurriría si en la acción se apuntaba a la Municipalidad. El propio Dr. Adeff señaló a La Opinión que “la Municipalidad no tiene responsabilidad y no lo digo porque yo sea el Asesor Letrado sino porque es así”. Adeff dijo además que si en su propio estudio se planteara una situación así algo debería modificarse: o su estudio no toma la demanda o él debería dejar de ser el abogado de la Municipalidad. Ninguna de estas opciones se analiza. El Dr. Sergio Ocampo es yerno de Adeff y ese vínculo es el que dio lugar a las interpretaciones y especulaciones que rondaron a este tema.
El control de las carnicerías que venden o elaboran chacinados y los criaderos en los que se faenan cerdos que después terminan en productos de mostrador depende originalmente como lo indica el organigrama del Ministerio de Asuntos Agrarios, de la Dirección Provincial de Ganadería y Mercados, que tiene una “Dirección de Sanidad y Fiscalización Ganadera”.
Como ya se ha escrito en otras oportunidades, con un plantel muy reducido y poca preparación técnica este sector del gobierno provincial tiene responsabilidades sobre el Registro Ganadero, la Fiscalización de Industrias Cárnicas, Fiscalización de Industrias Lácteas, Campañas Sanitarias y Laboratorios y Animales Menores de Granja.
En las grandes dificultades encontradas hasta para las habilitaciones de los establecimientos que venden este tipo de productos está una de las claves de la acción y además, en la reacción repentina de inspeccionar y recorrer muchos lugares que durante meses operaron con los mismos riesgos sin que nadie interviniera.