Dos aprehendidos, tres policías heridos y dos móviles rotos, el saldo del conflicto en Hermano Indio
Este martes, una dotación de bomberos acudió a una casilla ubicada en el pasillo del barrio Hermano Indio para sofocar un incendio. Fueron acompañados por patrulleros, porque en la zona suele haber conflictos que se traducen en agresión e intentos de robo a los propios voluntarios. Mientras ellos apagaban el fuego, los policías fueron agredidos y comenzó un disturbio que incluyó hasta ataques a la prensa que cubría el episodio.
El barrio Hermano Indio fue escenario este martes de un conflicto que incluyó el incendio de una vivienda, corridas, disturbios, balas de goma, aprehendidos, heridos, vehículos oficiales dañados y hasta periodistas agredidos.
Todo comenzó alrededor de las 10.30 de la mañana, cuando una dotación de Bomeros llegó al barrio convocada para apagar el incendio que se produjo en la casilla donde residía Amanda Fátima Frutos con sus hijos de 2 y 3 años, quienes jugaban con un encendedor y provocaron el fuego en un colchón.
Las pérdidas fueron totales. Mientras los bomberos terminaban su tarea, la presencia policial —convocada porque cuando van los voluntarios suelen ser atacados y hasta asaltados— provocó gritos e insultos, lo que derivó en un conflicto entre vecinos y los efectivos de la Comisaría.
Según consta en la causa judicial que tramita en la Fiscalía Nº 11 a cargo de Viviana Ramos, un conocido delincuente identificado como Fernando Banegas, con diversas causas penales en su contra por abuso de arma y delitos contra la propiedad, agredió a uno de los policías a cargo del operativo.
El joven de 26 años habría atacado al policía con un arma blanca casera: la hoja de una vieja tijera. El efectivo evitó el puntazo y desarmó al agresor. Cuando procedía a aprehenderlo y trasladarlo a la Comisaría, comenzo la batahola porque hubo quienes quisieron evitar el procedimiento.
Varios vecinos del barrio rodearon al policía y al aprehendido y comenzaron a arrojar piedras. Los proyectiles lesioaron a tres efectivos policiales y dañaron el parabrisas de uno de los patrulleros que había llegado a la escena. Otro coche de la Policía también sufrió daños en el marco del conflicto.
Mientras tanto, en otro sector, otros vecinos reclamaban a la prensa, que había llegado para cubrir el incendio, y pedían que se hicieran presentes en la zona donde había disturbios con la policía. En ese marco, mientras un periodista de La Opinión y el camárografo de la TV local y su cronista se acercaban, hubo agresiones.
Una mujer con un escobillón en la mano increpó a los periodistas y, en medio de gritos e insultos, se bajó los pantalones y mostró sus partes íntimas, lo que quedó filmado por las cámaras del canal local, en medio de una confusa situación.
Mientras eso sucedía, un hombre de remera blanca, identificado como Marcos Roberto Hermida, de 44 años, y sobre quien también pesan varias causas penales, se acercó a los periodistas con piedras de gran tamaño en sus manos.
Ya cerca de los cronistas, arrojó una piedra y le pegó una patada al trípode de la cámara de la TV. No alcanzó a lanzar el otro piedrazo porque llegó un patrullero del Grupo de Apoyo Departamental (GAD), de quienes intentó huir sin suerte. Del móvil bajaron tres efectivos y aprehendieron al agresor.
Tanto Hermida como Banegas fueron trasladados a la Comisaría local e imptuados de los delito de lesiones, daños y resistencia a la autoridad. Hubo efectivos policiales que resultaron con excoriaciones varias, calificadas como lesiones leves.