Dos accidentes fatales vuelven a llamar la atención
Tres personas fallecieron este fin de semana en San Pedro. Dos de ellas murieron como consecuencia de graves accidentes de tránsito en zonas alejadas del centro de la ciudad y en choques caracterizados por la alta velocidad. Para el saldo luctuoso se suma la muerte de una persona que habría sufrido un ataque cardíaco en momentos que se encontraba nadando en una zona cercana al camping Cantando en el Río.
Un saldo poco frecuente para un fin de semana en la ciudad. Tres personas fallecieron en accidentes; dos de ellas al protagonizar choques de gran violencia. En la madrugada del sábado, un Renault 12 que transitaba por la calle Pellegrini al 2800 impactó contra un camión que se encontraba estacionado sobre la mano izquierda, esperando para ingresar a cargar a la empresa cerealera Ramón Rosa. Como consecuencia del choque falleció José Ramón Albarenque, de 55 años, mientras que el conductor del vehículo, Héctor Alberto Obregón, de 32 años, fue llevado al Hospital local e internado en terapia intensiva, con lesiones leves. Por su parte, el chofer del camión, oriundo de Reconquista, Santa Fe, resultó ileso. La causa fue caratulada como homicidio culposo. El chofer del camión permaneció detenido durante algunas horas y, luego de ser liberado, retornó a su ciudad de origen. Albarenque y Obregón venían de la fiesta de casamiento de la hijastra del primero. Al querer sobrepasar a una camioneta se encontraron de frente con el camión que se encontraba mal estacionado.
El chofer del camión justificó la riesgosa posición en la que se encontraba el camión señalando que en su ciudad se puede estacionar sobre el carril izquierdo. Tan tranquilo estaba que se encontraba durmiendo en la cabina a la espera de su turno. Cabe destacar que la zona no se encuentra debidamente señalizada si se tiene en cuenta que es frecuente la llegada al lugar de camiones provenientes de otras localidades para realizar cargas y descargas de cereales.
Otra vez la fatalidad
La segunda víctima fatal del fin de semana fue un hombre de 37 años que viajaba a bordo de un ciclomotor en la madrugada del domingo. Alrededor de la 1.40 de la mañana, en la esquina de Aulí y Los Andes chocaron, un ciclomotor marca Zadina 50 c.c., color rojo conducido por Carlos Barboza, con una motocicleta Honda Guerrero 110, en la que se desplazaba Rubén Darío Lovello, de 37, quien falleció en el lugar dado que, como consecuencia del episodio, impactó su cabeza contra el suelo. Barboza, por su parte, solo sufrió algunos golpes, sin mayores consecuencias. Según testigos del accidente, ambas motos venían a gran velocidad.
Lovello, oriundo de Capital Federal, se desempeñaba desde hace algunos meses como chofer en nuestra ciudad y era padre de tres chicos. Según relataron fuentes extraoficiales, ambos ciclomotores se desplazaban en la misma dirección y al cruzarse un perro, las motos se acercaron chocando y desviándose la de Lovello hacia un costado con una caída fatal.
Muerte por negligencia
El domingo por la tarde, a las 16.30, fue rescatado de las aguas del riacho San Pedro, en las cercanías del balneario Cantando en el Río, el cuerpo de Julio Roa, de 56 años. Roa era oriundo de Claypole pero se encontraba viviendo en nuestra ciudad, en la intersección de las calles San Martín y Litoral, por motivos laborales.
Según fuentes consultadas, se encontraba en el lugar con un grupo de amigos. Después de almorzar decidió ingresar al riacho, a pesar de que sus amigos le pidieron que no lo hiciera ya que en la zona está expresamente prohibido entrar al agua. Roa ingresó hasta la mitad del riacho y comenzó a las brazadas. Alertados ante esta situación, los amigos ingresaron a rescatarlo con una piragua. Cuando llegaron al lugar, Roa ya había fallecido. Si bien se desconocen las causas de la muerte, no se descarta que Roa haya sufrido un infarto que le impidió salir con vida del lugar. Luego de cumplirse con las diligencias pertinentes, el cuerpo fue entregado a sus familiares.
El Prefecto Castellú informó que el riacho San Pedro tiene en ese sector una profundidad de 6 metros con pozos que alcanzan hasta los 12 metros.
En el momento de la tragedia se estaba llevando a cabo la competencia de Aguas Abiertas organizada por la Asociación de Guardavidas de San Pedro, en el marco del festival Viva el Río que partía desde Cantando en el Río. Prefectura estuvo presente en el balneario en el que tuvo lugar la tragedia desde las 15.30 hasta las 16.10 con el Guardacostas 95, la moto de agua de Prefectura y diferentes embarcaciones. Recién tomaron conocimiento de lo sucedido a la altura del Club Náutico.