Detuvieron a un reducidor de cobre
Tras un operativo policial, realizado en una vivienda de Lavalle 1150, se detuvo a una persona que se dedicaba a reducir y comercializar cobre.
Desde hace más de un año, esta zona de la provincia de Buenos Aires, se ha caracterizado por ser unas de las principales en la comercialización de metales. En los últimos tiempos, el robo de cables se ha transformado en una tarea diaria. Con un rédito económico importante y un centenar de personas que se dedican a excavar o trepar, dependiendo del objetivo en cuestión.
Hace pocos más de un mes sorprendió a todos, la presencia de unas 30 personas excavando sobre los laterales de la Ruta 1001, buscando el plomo que cubría el cobre del cable coaxil que ya había sido retirado.
Estas personas aseguraron que es el único trabajo que tienen, pero lo que nadie contó es que detrás de ellos se amparaba una verdadera empresa reducidora de metal, y que el negocio de los últimos años es el cobre.
En la tarde del viernes, la Policía local efectuó cuatro allanamientos, tratando de establecer la presencia de algunos elementos robados en los últimos días. Principalmente, el cobre de diferentes tendidos eléctricos del que había sido víctima la Coopser, y que dejó a miles de usuarios sin alumbrado público.
En uno de los procedimientos, se dio con quien sería uno de los principales reducidores. Y no sólo de la ciudad, sino de toda la zona.Se trata de Miguel Novella, quien fue detenido de inmediato y ya poseía antecedentes por casos similares.
Además, en el interior de la vivienda ubicada en Lavalle 1150, se hallaron 140 kilos de cobre, preparados para comercializar.
Este sería el inicio de una serie de operativos que seguirían realizándose en diferentes lugares de la ciudad, para tratar de terminar con esta serie de hechos delictivos, que han resultados muy redituables para quienes lo comercializan.
La Policía entiende que, con la detención de Novella, se corta uno de los eslabones más trascendentes de esta clase de ilícitos. Pues se asegura por el relato de algunos testigos, que el “famoso” rastrojero verde que es de su propiedad, sería quien recorría diariamente las zonas donde se extraían los cables.