Detienen a vendedor de equipos de GNC “truchos”
Un damnificado lo reconoció en el Paseo Público y avisó a la policía. Pero la fiscalía decidió liberarlo, luego de labrarse las actuaciones por estafa o defraudación. Había vendido unos 30 equipos en la ciudad con la oblea correspondiente, pero nunca habían sido inscriptos en el Enargas.
Una persona que habría cometido una estafa en San Pedro en el año 2003, fue detenida este fin de semana por la policía aunque poco después quedó en libertad por orden de la fiscalía. Se trata de un vendedor de equipos de GNC de apellido Brócoli, que había llegado a la ciudad en el año 2003, y tomado contacto incluso con un taller local para comercializar equipos de GNC a un precio sumamente conveniente.
Según informaron fuentes policiales, en ese momento en San Pedro los equipos costaban unos $ 1.400, pero esta persona los vendía a unos $ 1.100, lo que tentó a muchos compradores. En total, se cree que unas treinta personas al menos habrían adquirido estos equipos, que además eran entregados con su correspondiente documentación y la oblea de inscripción en el Enargas. Pero pasado el tiempo prudencial y al vencerse estas obleas, los compradores se vieron envueltos en un problema. Al solicitar la inspección y renovación del permiso del ente regulador, se les informó que sus equipos no figuraban en el registro, por lo que la documentación era apócrifa.
Muchos de los equipos habían sido adquiridos por intermedio del mencionado taller mecánico local, aunque la policía aclaró que sus propietarios no tenían ninguna responsabilidad porque también habrían sido engañados por esta persona.
El pasado domingo, un damnificado sampedrino reconoció al vendedor entre los turistas que paseaban por el Paseo Público y dio aviso a las autoridades para que intervengan. La misma persona ofreció la documentación correspondiente para corroborar la estafa. Un patrullero lo detuvo y lo trasladó a la Comisaría, pero luego de labrarse las actuaciones la fiscalía en turno dispuso que el hombre recuperara su libertad. Las autoridades contarían ahora con varias declaraciones similares que confirmarían la estafa, y en los próximos días la fiscalía podría recibir más documentación con datos de los testigos por lo que se espera que con el tiempo, se tomen medidas concretas con el estafador.
Pero más allá del caso particular, la historia sirve para alertar a los automovilistas sobre el peligro de adquirir equipamiento de este tipo a particulares y sin contar con el respaldo de alguna firma reconocida.
Algunos ejemplos en la Capital Federal que los medios han mostrado en los últimos meses son aún más preocupantes, por la proliferación de equipos de GNC “truchos” y sin los debidos controles que terminaron en peligrosos accidentes. Otro ejemplo de que en ocasiones lo “barato”, cuesta mucho más caro.