Desaparecieron las muestras de ADN del supuesto padre de Agustín
A fines de octubre de 2009 quien fue señalado por Gabriela López como el padre del bebé asesinado se sometió a un estudio de ADN para determinar si su patrón genético coincidía con el del niño nacido en la Clínica San Martín. Increíblemente, aún no llegó ningún resultado y nadie sabe dónde está esa muestra.
A siete meses de uno de los casos más resonantes y espantosos de la historia policial de la ciudad, se siguen esperando los resultados del ADN efectuado a Gerardo Sobrino, supuesto padre de Agustín, el bebé de apenas tres días que fue asesinado por su madre y enterrado en una tapera del paraje El Descanso.
Si algo identificó al “Caso Agustín” fueron las constantes irregularidades que se advirtieron desde el mismo día en que se supo de su desaparición. Desde el relato de la madre a la tardía actuación de la fiscal, todo estuvo inmerso en la confusión hasta que la propia madre confesó su crimen.
El colmo de esta suma de desaciertos ahora apunta al extravío de los resultados de las muestras del ADN efectuado a Sobrino. Desde la fiscalía de la Dra. Franca Padulo nadie emite palabra pero pasan los días y los resultados no llegan.
Existen muchas versiones que nadie quiere oficializar transformándolas sólo en sospechas pero es bueno destacar que los análisis efectuados a Gabriela López y al pequeño Agustín sí llegaron en tiempo y forma. Ya en diciembre, antes de la feria judicial, se habían conocido, pero ha pasado el tiempo y el restante estudio no aparece cuando los tres análisis fueron enviados al mismo tiempo.
Aunque a muchos les moleste y mal que les pese, los resultados restantes serán determinantes. No sólo para corroborar la dudosa paternidad de Sobrino sino también para sumar una “perlita” más a toda esta historia, pues sería un verdadero escándalo saber que los resultados son negativos. Para muchos esta causa tiene todavía un final abierto.
El Dr. Mori, abogado patrocinante de Gerardo Sobrino fue quien confirmó que los resultados todavía no llegaron. “Es un verdadero papelón”, dijo el profesional. “Acá tiene que haber habido un error en el envío del resultado pues los exámenes desde acá salieron los tres juntos”. El letrado agregó: “La tarea fue efectuada por la oficina pericial de La Plata, pero nunca llegaron los resultados”.
Siempre tarde
Se estima que la fiscalía debería exigir su rápida entrega pero nadie parece saber dónde están las muestras de Sobrino. Tampoco se ha avanzado demasiado sobre las circunstancias en las que se produjo el parto y los controles de salida de la madre con su hijo.
Esta historia aún guarda varios puntos enigmáticos que siguen desnudando una increíble lentitud judicial, la misma que sorprendió desde el momento en que se produjo el hecho y el día y medio que tardó en enterarse la Fiscal. Si bien en su momento la Dra. Franca Padulo solicitó las pericias pertinentes haciendo lugar al pedido del Dr. Mori, las mismas se realizaron con bastante retraso. También se produjeron distintos acontecimientos como la falta de tarjetas y precintos que fueron las causas que demoraron el análisis de ADN para determinar la paternidad. La falta de claridad a la hora de actuar en el lugar donde fue enterrado el bebé también salió a la luz, pues se trabajó en la tapera pero no en la casa.
Esa misma tarde y a los pocos minutos, todos tuvieron que volver y efectuar un allanamiento en la casa de la familia López, en donde hallaron diversos elementos. Lo más particular del caso fue que entre algunos elementos que había a la vista se encontraba una pala que ni siquiera fue tenida en cuenta como elemento de prueba. Por último y como para ponerle fin a este verdadero concierto de desaciertos, se produjo la entrega del cuerpo de Agustín a sus familiares. Esto aconteció cruelmente dos meses después de que se produjera el hecho.