Crimen en Ramallo: la defensa del verdulero apunta contra su esposa
Avanza la investigación por el asesinato de Silvia García en la vecina localidad. Fiscalía analiza las pruebas para solicitar la prisión preventiva. Ramón Ovejero tiene una abogada particular que planteó su inocencia, adelantó que en las próximas horas pedirá su excarcelación y apunta a Mariel Zamora, como la principal sospechosa.
Ramón Ovejero y Mariel Zamora, marido y mujer oriundos de Gobernador Castro, permanecen detenidos y seriamente vinculados al asesinato de su empleada y amiga Silvia García, la mujer que desapareció el jueves 19 de noviembre y fue hallada al día siguiente muerta en la cámara frigorífica del comercio donde trabajaba, lugar del que nunca había salido, al contrario de lo que dijeron los acusados.
Por estas horas la causa está en plena investigación, se aguardan resultados de peritajes y el Fiscal Darío Giagnorio reúne detalles para solicitar la correspondiente prisión preventiva de ambos.
La semana pasada, personal judicial y de Policía Científica regresaron al comercio que aún permanece clausurado y efectuaron una nueva inspección, que tenía dos objetivos: recolectar pruebas para determinar en qué sector de la verdulería fue asesinada la mujer y hallar sus pertenencias.
Los exámenes de Luminol para detectar la presencia de manchas hemáticas arrojaron resultados positivos y fue encontrada, escondida en el depósito, la cartera de García, donde estaban su celular y sus documentos.
Amigos, familiares y vecinos de la víctima encabezaron una marcha para reclamar justicia y repudiaron a la familia de los imputados, que al día siguiente del hallazgo del cuerpo abrieron otra verdulería que poseen a dos cuadras del escenario fatal.
Detalles y conjeturas
Si bien el caso está en plena etapa de instrucción, para el Fiscal Darío Giagnorio, tanto Ramón Ovejero como Mariel Zamora estuvieron en el momento del crimen y habría sido la mujer quien asesinó a Silvia García.
Las primeras presunciones sobre cómo se produjo el hecho hacen pensar que, por las características de la herida, fue la abogada quien hirió de muerte a la víctima. El tipo de lesión, el ángulo, la altura de las mujeres, la posición que habría tenido García en el momento de su muerte y el mecanismo de arrastre del cuerpo hacen suponer que fue ella quien ideó y provocó el deceso.
Mientras tanto buscan obtener las piezas fundamentales de esta historia para poder determinar qué rol cumplió Ovejero en ese lugar. Qué fue lo que pasó ese día, antes, durante y después del crimen.
Según pudo establecer la investigación, antes de que Silvia García muriera se produjo una situación de amenazas o intercambio de palabras entre las personas. Giagnorio está convencido de que a García la hicieron agachar y ese habría sido el momento en que fue asesinada. En concreto, la víctima habría estado arrodillada cuando prácticamente fue decapitada.
Ahora procuran establecer la posibilidad de que haya otras personas involucradas o, por ejemplo, saber con precisión qué pasó tras el crimen y en ese lugar.
Es que un corte de las características que sufrió la víctima produce una importante pérdida de sangre. Si se tiene en cuenta que según lo estimado la asesinaron sobre el horario de cierre del comercio, si se le suma el tiempo que llevó limpiar, borrar todas las huellas y los rastros visibles, más el traslado del cuerpo desde el depósito hasta la cámara frigorífica, pasaron al menos dos o tres horas más.
Fiscalía busca determinar si en ese período alguien más estuvo al tanto de lo que sucedía dentro de la verdulería del horror. Uno de los interrogantes, por ejemplo, es quién quedó al cuidado de los hijos del matrimonio esa noche mientras ellos permanecían en el comercio.
“Ovejero es inocente”
Así lo planteó la Defensora particular del imputado, la abogada Nancy Casem, quien fue contratada por la familia del hombre para que lo defienda, aunque no a su esposa, Mariel Zamora.
Existen ciertas conjeturas que van más allá de lo planteado por el Fiscal y que se intenta potenciar desde la Defensa. Entre ellas, poner en duda la presencia del hombre en la escena del crimen.
Muchos advirtieron con asombro la postura que mostró Ovejero durante la búsqueda de García mientras estaba desaparecida. El comerciante no sólo participó del rastrillaje sino que se lo vio involucrado en todo lo que estaba pasando. Hasta fue parte de la reunión y los encuentros que los investigadores mantuvieron con el círculo íntimo de la mujer cuando, al no aparecer, las hipótesis más graves iban cobrando forma.
El Fiscal Giagnorio confirmó que fue el propio Ovejero quién pidió regresar a la verdulería en la tarde del día siguiente a la desaparición de García para retirar algunas pertenencias de uno de sus hijos que tenía un acto en la escuela. Ese momento fue aprovechado por los investigadores para volver al lugar y hacer una búsqueda medianamente profunda, que derivó en el hallazgo del cuerpo.
En ese sentido, la Defensa planteó que el acusado nunca opuso resistencia y que su postura fue siempre la de colaborar.
La abogada que patrocina al verdulero asegura tener pruebas para demostrar que es totalmente inocente y hasta opinó que se debería investigar al entorno de la mujer acusada. Su argumento fundamental es que su cliente no participó del hecho.
Casem está convencida de que la detenida sabía perfectamente lo que estaba haciendo y que “eso no lo puede hacer cualquier persona, tiene que ser alguien instruido, con conocimientos técnicos”, en clara alusión a Mariel Zamora, quien hace poco tiempo había recibido el título de abogada.
La defensa de Ovejero confirmó que solicitó peritajes sobre diversos números telefónicos y adelantó que en el transcurso de esta semana solicitará la excarcelación del acusado.