Crecen las quejas sobre los robos en el Hospital
Hasta el momento nadie se ha hecho cargo ni se han tomado medidas por la inseguridad reinante en las afueras del Hospital.
Una vecina denunció el robo de su moto y a partir de allí no dejaron de sucederse una serie de acontecimientos que han puesto en la mira (como si fuera poco) al Hospital “Emilio Ruffa”. La falta de decisiones y las flaquezas que evidencia el personal destinado a cuidar dicho lugar, no hacen más que causar malestar y preocupación en los usuarios que diariamente concurren al lugar.
La mujer llegó al nosocomio con un esguince de tobillo, la atendieron en la guardia pero cuando salió descubrió que le faltaba su moto.
El hecho fue denunciado y además, otras personas que esperaban en el Hospital le confiaron que lo mismo ya les pasó a otras víctimas que fueron a atenderse en la guardia.
La trabajadora explicó que “A pesar de la vigilancia que hay en el Hospital, siempre se producen robos. Lo más común era que falte alguna bicicleta, pero ahora desaparecen motos”.
En las últimas semanas se han registrado una anormal cantidad de robos de ciclomotores. Y lo más particular del caso es que no han aparecido responsables o culpables directos de estos episodios.
Durante el fin de semana un turista oriundo de Máximo Acosta, denunció que le robaron objetos personales, entre los que se encontraban una credencial de la policía bonaerense del interior de su Ford Falcon. El vehículo estaba estacionado en las puertas del nosocomio ya que su mujer fue atendida por un problema de salud.
Habitualmente el mencionado lugar es un “hervidero de gente”, y según a quien se le pregunte sobre el robo, lo primero que se informaba era que tal sector o área no tenía nada que ver con el ilícito, más allá de que el noventa por ciento de los robos se producen dentro de las instalaciones, sobre el estacionamiento de motos y bicicletas. Con respecto a los hechos se hicieron notar con insistencia las distintas hipótesis sobre los autores del hecho, pero siempre dando crédito a que alguien ligado directamente al hospital debía haber participado o por lo menos ser negligente. Se cuestionó la presencia de algunas personas que cumplen tareas allí.
Presumen que todo sucede en un descuido de los vigilantes o en el cambio de guardia. Los responsables actuaron de manera rápida y eficaz. Esta serie de robos han dejado al desnudo la vulnerabilidad del edificio, el principal centro público de salud.