Coronavirus: Qué es el tratamiento con ibuprofeno inhalado que se aplica en San Pedro y qué resultados dio
El secretario de Salud, Guillermo Sancho, explicó en #RadioCuarentena con Lilí Berardi que desde hace "dos o tres semanas" están asistiendo a pacientes con COVID-19 con ibuprofeno sódico inhalado y "registrando datos" para analizar qué "beneficios" otorga que "justifique su utilización". Además, señaló que hasta el momento los "efectos" que obtuvieron "no son demasiado importantes". "Seguimos investigando", aclaró.
El coronavirus no tiene tratamiento concreto y, mientras se trabaja a nivel mundial en una vacuna, investigadores brindan diferentes alternativas a los médicos que con los recaudos pertinentes prueban en pacientes contagiados. En las últimas semanas, al plasma de personas recuperadas se le añadió el ibuprofeno sódico inhalado que también se está utilizando en San Pedro sin tan buenos resultados hasta el momento, tal explicó el secretario de Salud, Guillermo Sancho, en #RadioCuarentena con Lilí Berardi.
"Hace dos o tres semanas empezamos a trabajar con este producto en la clínica médica del Sanatorio Coopser y estamos registrando datos para ver si merece continuidad en otro lugar. Lo empezamos a probar en un paciente ventilado mecánicamente y no vimos grandes cambios, pero es difícil nebulizar a un paciente con ventilación mecánica. También el equipo de Raúl Bertone lo hizo con pacientes que no estaban ventilados pero si requerían oxigeno complementario", indicó el funcionario.
"Los efectos que tuvimos no son demasiado importantes, pero seguimos investigando", dijo Sancho
Sobre los resultados que se obtuvieron, Sancho dejó en claro que hasta el momento no se presentó como solución pero que tampoco hay registros de que sea perjudicial: "Los efectos que tuvimos no son demasiado importantes, pero seguimos investigando. Estamos viendo si merece algina continuidad en otro lugar o si tenemos algún beneficio en los pacientes que justifique su utilización. No queremos generar expectativas porque es un producto experimental. Las personas que lo reciben firman un consentimiento. Mal no hacen, no hay registro".
Por último, dejó en claro porqué el tratamiento es de su interés y motivó retomar el contacto con Laboratorio Luar: "En el Austral usábamos algo similar para tratar pacientes con fibrosis quística que entraban en internación por alguna neumonía o patología pulmonar. Veíamos que iba muy bien. Me pareció un antinflamatorio que vaya profundo a la parte pulmonar y pareciera que podía tener beneficios".