Coronavirus: Cómo afecta a los deportistas amateurs la inactividad y cuánto les costará el regreso a los entrenamientos
La Opinión relevó con profesores y entrenadores de diferentes disciplinas cuán perjudicadas están siendo las personas que practican deporte de manera no profesional ni en el alto rendimiento y no pueden hacerlo desde el 20 de marzo por la cuarentena para evitar la propagación del COVID-19. El análisis de Andrés Níbale, Agustín Castro y Valentín Bravo (fútbol), Mario Prado -h- (hockey), Edgardo Rasio (canotaje) y Maximiliano Silos (tenis).
El 20 de agosto se van a cumplir cinco meses de que en San Pedro no se puede hacer ningún deporte por la cuarentena para evitar la propagación del coronavirus y, en consiguiente, aquellas personas que habitualmente practicaban alguno de forma amateur o recreativa se deben conformar con entrenar en sus casas sin contacto con su campo de juego.
En ese contexto, todos involucionaron en algún aspecto y La Opinión relevó con profesores y entrenadores de diferentes disciplinas cómo afecta a los atletas amateurs la inactividad y cuánto les costará el regreso teniendo en cuenta que no son profesionales ni de alto rendimiento, es decir, que en su mayoría alternan la actividad física con trabajo o estudio.
Andrés Níbale es parte del Departamento de Evaluación Deportiva de Náutico que asiste a todos los atletas del club y, en consiguiente, está en contacto con distintas disciplinas. "Lo que más afecta es la sensibilidad del deportista en su campo de juego" dejó en claro quien también es palista e integra el equipo del Celeste en cada Argentino de Velocidad. Y agregó: "Lo que siempre concluyo es que, si no nos entrenamos, hablando de la famosa curva que hay que aplanar, lo que nosotros tenemos que aplanar es la curva de involución. Vamos involucionar todos físicamente. Por ejemplo: alguien que tiene pesas en su casa mejoró en ese lado pero aeróbicamente perdió mucha capacidad seguramente. Todos vamos a involucionar pero hay que mantenerse activos lo más posible para aplanar esa curva".
Además, analizó que "si en septiembre" se abren los clubes "los entrenamientos van a ser con protocolo" y, en el caso de los deportes conjuntos, "pocos jugadores" lo que implica no poder hacer nada "táctico" que es "la esencia del deporte". "Sí se podrá técnicamente pero no es lo mismo, por eso creo que el año deportivo está perdido. Si se aprovecha lo que queda del año y la pretemporada del 2021, en marzo estamos óptimos siempre hablando de la capacidad del club Náutico porque un atleta de elite tarda mucho más en volver a como estaba".
-Níbale junto a Gonzalo Carreras, el palista olímpico de Náutico. Foto: Departamento de Evaluación Deportiva.
En San Pedro, como en Argentina, el deporte más popular es el fútbol y si bien el Consejo Federal de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) habilitó a los equipos de primera a entrenar desde el 7 de septiembre, es la Liga Sampedrina (LDS) la que debe dar el visto bueno en concordancia con el contexto sanitario y las medidas vigentes en ese momento por parte de la Municipalidad. En síntesis, es difícil que en septiembre los futbolistas vuelvan a la cancha y, cuando lo hagan, los preparadores físicos de los clubes tendrán que tomar recaudos para evitar lesiones, indicó Agustín Castro, profesor de la primera de Paraná: "Es más duro que volver en enero o febrero para una pretemporada. Es muy raro, hay que hacer actividades preventivas porque es gente amateur y el trabajo diario de cada uno genera una sobrecarga en los músculos que hay que llevar con ejercicios preventivos para después dar fuerza para lo que viene en una pretemporada fuerte".
En ese contexto, Castro dejó en claro que al no ser personas que se dedican al fútbol las actividades que desarrollan en su vida cotidiana incide como también la edad: "Creo que en categorías superiores va a ser mucho más difícil la vuelta que en categorías inferiores. Ojalá muchos con esto no dejen de entrenar, ese es otro tema. Ya vamos más de cuatro meses y no se sabe cuándo vamos a volver". Y sobre el plazo para que los jugadores recuperen su forma física, aseguró: "Para hacer un buen trabajo necesitamos mínimo tres semanas de adaptación para que el jugador pueda volver bien, que el grupo agarre confianza y recién ahí poder realizar una mini pretemporada o lo que sea de acuerdo a si hay campeonato o no este año. En esas tres semanas tenés que hacer pelota también porque no se tocó en cuatro meses".
Valentín Bravo, a cargo de la preparación física de La Esperanza, se manifestó en la misma línea que Castro y recalcó que "el que hizo algo en su casa durante la cuarentena va a tener apenas un plus de ventaja por sobre el que no hizo porque no se puede entrenar de la misma manera" ya que no se cuenta con espacio "para hacer un buen entrenamiento". "Es como volver a hacer una pretemporada de vuelta y agarrar ritmo. No todos entrenaron, no todos tienen las mismas las condiciones. Cuando trabajas con grupos amateurs todo se empareja físicamente", añadió.
Sobre cómo afecta en lo físico a los futbolistas la inactividad, sostuvo que no depende de la edad de cada uno sino de la condición que tenían antes de iniciada la pandemia: "Hay muchachos de 35 años que están mejor físicamente que otros de 20. Depende el cuerpo de cada uno. El que tiene más de 30 años y juega al fútbol como amateur es porque físicamente está bien, sino se retiran antes".
-Castro y Bravo, preparadores físicos de Paraná y La Esperanza respectivamente. Fotos: La Opinión.
Mitre tenía en 2020 un compromiso muy importante que asumió al afiliarse a la Asociación de Hockey del Oeste (AHO) gracias a un proyecto en el que unió su grupo con otro que se fue de Los Andes encabezado por el profesor Mario Prado. Sin embargo, ni siquiera alcanzó a debutar porque el COVID-19 frenó el inicio del torneo en marzo y el entrenador analizó que "el parate" los afecta "igual que a la mayoría de los deportes": "Después de haber hecho la pretemporada, a tres días de empezar el torneo arranca la pandemia que pensamos que iba pasar rápido, seguimos entrenando por Zoom y cada uno en casa pero de a poco nos empezamos a desinflar y psicológicamente hoy no estamos preparados para volver. Todos los deportistas que somos amateur los hacemos por placer, para buscar un momento de esparcimiento o un momento con uno mismo. Esta situación nos afecta más en ese aspecto. El otro día una chica me decía que sentía que le habían arrancado una parte de sí porque tiene 21 años y desde los 4 juega al hockey, la entiendo. Algún aprendizaje esto nos va a dejar pero nose cual, lo analizaremos cuando termine este mal trago".
Sobre el futuro, Prado admitió que la "incertidumbre de qué va a pasar" provoca que no se puedan preparar "física ni mentalmente" porque les falta "motivación", sobre todo luego de haber armado un protocolo de entrenamiento cuando San Pedro estuvo cerca de pasar a la Fase 5 de la cuarentena, avance que se frenó por la aparición de varios casos positivos de coronavirus. Y detalló: "Lo que está planeado es volver a hacernos amigos de la bocha, trabajar físicamente despacio cuando esto se habilite y algún torneo interno si es que se puede. La preparación que viene es para el año que viene porque no creo que este año la asociación haga algún torneo. Los clubes no están preparados y económicamente también es difícil. La mayoría de los clubes de la asociación no están entrenando".
Por último, habló de cómo se rearmaron en el Rojo donde cuentan con alrededor de 120 jugadoras de las que supuso que en las "categorías competitivas" van a continuar jugando "la mayoría" pero desconoce en "formativas". "Para nosotros en Mitre era un cambio muy grande para la mayoría pero no pudimos iniciar la temporada a pesar de que habíamos reforzado todas las categorías y teníamos un plantel riquísimo. El año que viene es un volver a empezar pero el parate nos afectó bastante. Es cuestión de que todo esto empiece a resurgir un poco cuando mermen los casos", concluyó.
-Mario Prado, entrenador de Mitre en la Asociación del Oeste. Foto: La Opinión.
Edgardo Rasio es un entrenador con vasta trayectoria y de los mejores de San Pedro, algo que demuestra año a año en Náutico donde ubicó al equipo de canotaje como el mejor de Argentina y, también, le dio al país la única medalla olímpica en la disciplina con Valentín Rossi en Buenos Aires 2018, los últimos Juegos Olímpicos de la Juventud. "Afecta y mucho el entrenamiento o desentrenamiento que se está haciendo porque al hacerse en casa, con lo pocos elementos que se tienen, afecta muchisimo", dejó en claro desde el vamos.
Sobre en cuánto tiempo podrán recuperar lo perdido una vez que sus palistas puedan volver al agua y el gimnasio, Rasio explicó: "Se calcula que para competir se va necesitar la mitad de los días que se perdieron. Por ejemplo, si estamos 120 días parados vamos a necesitar 60. Desde ya que se podrá competir de igual a igual con los que estén en las mismas condiciones".
Como el resto de las disciplinas, se desconoce en la Provincia de Buenos Aires cuándo se podrá reanudar el canotaje, contexto que Edgardo Rasio analizó como "complicado" comparado a otras provincias en las que sí están remando: "En algunas ya hace varias semanas que lo están haciendo como en Santa Fe. Nos están llevando más de un mes de ventaja y todavía no tenemos miras de volver a entrenarnos. No sé si nosotros este año vamos a poder volver a competir porque bajo estas condiciones va a ser muy difícil".
El último en ser consultado por La Opinión fue Maximiliano Silos, profesor de tenis en Los Andes y organizador del San Pedro Open, único certamen local para profesionales. Silos trabaja también con adultos y jóvenes amateurs y definió a la situación como "atípica" sobre todo porque "ningún tenista pasa tantos meses fuera de las canchas salvo por alguna lesión".
-Silos -izquierda- junto Bisio, finalista del San Pedro Open 2019. Foto: La Opinión.
"Yo creo que en el aspecto técnico no hay muchos cambios, a lo sumo hacer hincapié en los apoyos y ordenar al jugador o jugadora las primeras semanas. Respecto al tema físico, es delicado, ya qué hay dos tipos de jugadores/as: los que siguieron entrenando desde sus casas y los que no lo hicieron. Si bien entrenar en sus casas les ha servido, no se compara con el entrenamiento al que estaban acostumbrados", graficó al mismo tiempo en que señaló que de acuerdo a su punto de vista "físicamente el nivel bajó considerablemente" y que se debe "ser cuidadoso" al regresar a las canchas.
La Asociación Argentina de Tenis (AAT) es una de las que más hizo públicas sus gestiones para que la actividad regrese en las diferentes provincias y lo logró en muchas. Incluso, sobre Buenos Aires anunció que desde el 16 de agosto se podrá jugar en los partidos que estén en Fase 4 y 5 de la cuarentena aunque la Municipalidad consultó a la Jefatura de Gabinete de Ministros de la Provincia de Buenos Aires la cual dejó en claro que esa medida no es oficial ni todavía está garantizada.
En conclusión, Silos remarcó que "el parate es largo" y "afecta a todos los deportistas de todos los niveles" los cuales deberán tener un "regreso progresivo y con cuidados": "Llevará muchas semanas volver a estar en las condiciones que estaban antes de la pandemia. Que la ansiedad de volver a jugar y la motivación no lleve a hacer un esfuerzo grande que los ponga en riesgo, más aún quienes no hicieron actividad estos meses. El parate genera una disminución de la masa muscular, que sumado al sedentarismo genera un riesgo".