Continuar después de la tragedia
Tras el fallecimiento de Romina Casafúz, José Luís Deleglise y sus dos hijos volvieron a Santa Lucía para enfrentar el día a día luego del incendio que le costó la vida a la madre de familia. Nair se recupera de los injertos de piel que le hicieron en las piernas a tan corta edad. El bebé crece normalmente después del traumático nacimiento de fuego.
Hace poco más de 20 días la familia Deleglise retornó a Santa Lucía para comenzar una nueva etapa tras el fallecimiento de Romina Casafúz, la joven madre que el 24 de abril intentó reavivar el fuego de una estufa a leña y protagonizó un gravísimo accidente doméstico en el que sufrió quemaduras en el 60 por ciento de su cuerpo.
“Ya estamos todos en Santa Lucía”, respondió José Luís Deleglise pareja de Romina, a la primera pregunta que realizó La Opinión para actualizar el estado de salud de Axel, el bebé que nació tras el incendio, y de Nair, la niña de cuatro años que estaba junto a su madre cuando el fuego tomó gran parte de la vivienda.
Los tres están bien, afrontando la difícil situación de volver a la localidad para continuar su vida. Regresaron a vivir a la casa en la que se produjo el accidente pese a que muchos consideraban que no iba a ser bueno para los menores. “Los primeros dos o tres días estuvimos viviendo en la casa de un familiar”, relató José Luís pero aseguró que Nair quiso estar en su casa y tras realizar trabajos de pintura y reparación, cumplieron con el deseo de la menor.
“Lo que pasó lo vamos a ir aliviando” aseguró José Luís con tono firme, el que debe mantener para acompañar a sus hijos y afianzarse para ser el sostén de la familia. Su hermana y la mamá de Romina, colaboran en la crianza de los niños cuando José Luís se dirige al campo en el que realiza trabajos de “fumigación, siembra y cosecha”.
En septiembre
otro control
En poco más de un mes Nair deberá volver a al Instituto del Quemado para someterse a un nuevo control tras los injertos que le realizaron en sus piernas a raíz de las quemaduras que sufrió el día del incendio. El padre de la menor informó que, diariamente, la niña debe utilizar una calza y una media especial para mantener las heridas higienizadas y contraídas para que “en un futuro la nena tenga las piernas normales”. Según informaron los cirujanos a José Luís, en el cuerpo de Nair “quedarán muy pocas marcas ya que aún le falta crecer mucho”.
La niña, que de a poco recibe ayuda psicológica “para ir asimilando la situación”, volverá al jardín en los próximos días para continuar con las actividades que realizaba antes del accidente.
Axel está perfecto
El bebé, que hoy pesa seis kilos, nació tras la cesárea a la que fue sometida su madre horas después del incendio. “Esta todo normal”, indicó José Luís e informó que los últimos controles que recibió el niño se realizaron en el Hospital de Santa Lucía.
Pueblo solidario
Cuando la noticia cobró repercusión pública toda la localidad se solidarizó con la familia Deleglise que una fría mañana de abril sufrió un accidente doméstico que marcará para siempre la vida de Santa Lucía. Un grupo de amigos de José Luís y Romina comenzaron a realizar una colecta para juntar dinero y ayudar económicamente a la familia que debía pagar viajes, insumos y solventar todos los gastos que significaba tener al bebé internado en La Plata y a Romina y Nair en Capital Federal.
Afortunadamente José Luís nunca hizo uso del dinero que juntaron entre los vecinos ya que los dueños del campo donde trabaja colaboraron y “se portaron muy bien”, para afrontar esta dura situación. Por ello indicó que devolverá todo el dinero que se juntó. “La verdad que agradezco a todo el pueblo en general”, expresó e insistió: “Mi idea es devolver la plata porque no la usé. Todavía ni sé cuánta plata juntaron pero ni bien vaya aliviando todo esto voy a devolver la plata”.