Frío y calefacción: consejos para evitar accidentes por inhalación de monóxido de carbono
En pleno invierno, es frecuente que los sistemas de calefacción de los hogares funcionen durante horas, lo que aumenta el riesgo de intoxicación por monóxido de carbono, un gas generado por la combustión incompleta o incorrecta por el uso de combustibles tales como la leña, el carbón, kerosene, naftas o gas. Algunas recomendaciones para tener en cuenta, en esta nota.
El monoxido de carbono se produce por la combustión imcompleta de productos como la leña, el carbón, el kerosene, gas y otros derivados del petroleo. Es altamente nocivo, difícil de detectar y causante de graves accidentes.
Lo recomendable es contratar a instaladores matriculados para la conexión de gas y otros artefactos eléctricos, y que los artefactos que se instalen estén normalizados y homologados. Eso se puede constatar mediante la oblea de certificación.
Los conductos y las chimeneas para la evacuación de los gases deben estar bien conectados y no deben tener obstrucciones. ¿Ves manchas negras en las paredes cercanas o cielorraso? Cuidado, pueden indicar mal funcionamiento.
En los baños, dormitorios y ambientes cercanos, hay que instalar sólo calefones y calefactores de tiro balanceado, y en todos los casos, asegurar la permanente entrada de aire del exterior, evitando obstruir los conductos y las rejillas para ventilar.
Es muy importante revisar si que la llama de gas sea AZUL. Si es amarilla, es necesario que un instalador matriculado la regule. Además, quiene revise las conexiones debe hacerlo periódicamente.