Condenaron a un abusador detenido en nuestra ciudad
El Tribunal Criminal Nº 3 de San Isidro condenó a Hugo Villa. Un sujeto acusado de protagonizar 28 robos y tres abusos sexuales en las localidades de Vicente López y San Isidro. En 2008 fue capturado en el centro de nuestra ciudad cuando paseaba junto a su novia sampedrina.
Sobre el mediodía de ayer la Justicia condenó a Hugo Marcelo Villa, un sujeto de 34 años acusado de protagonizar 28 robos de diversa índole y tres abusos sexuales en las localidades de Vicente López y San Isidro.
En un principio, el fiscal Gastón Garbus, pidió 41 años de cárcel para el acusado pero el Tribunal Criminal Nº 3 de San Isidro condenó al depravado sujeto a la pena de 28 años de prisión de cumplimiento efectivo.
Villa, es apodado “Narigón”, y es un reconocido motoquero de esa zona en donde también se desempeñó como empleado de un local de tatuajes de Munro. Los jueces Marcela Helguera, Ezequiel Igarzábal y Carlos Vales Garbo lo hallaron responsable de 27 hechos de robo calificado por el uso de arma, uno de robo simple, cuatro de privación ilegal de la libertad agravada y violencia y tres hechos de abuso sexual triplemente agravado por acceso carnal, por ser gravemente ultrajante. Además fue reconocido por más de 20 de sus víctimas y en el momento de la detención y al allanar su domicilio se encontraron escondidos DNI, billeteras, carteras y hasta cosméticos de sus víctimas que guardaba como trofeos.
Detenido
en nuestra
ciudad
Lo particular de este caso, que ayer mismo fue noticia en los principales medios y portales del país, es que fue detenido en nuestra ciudad el 4 de diciembre de 2008 en la esquina de Pellegrini y San Martín, luego de detectarse mediante rastreo que uno de los celulares robados se lo había prestado a su novia para que se comunicara con una amiga.
Aquella tarde, en un principio se pensó que se trataba de un turista que paseaba por el centro de la ciudad en una poderosa moto junto a su pareja.
Momentos después, cuando fue interceptado por una comisión policial que se trasladaba en un auto de civil Fiat Palio rojo, se supo que era un temible delincuente que paseaba por la ciudad junto a su pareja sampedrina.
Ante la vista de propios y extraños, el sujeto fue obligado a bajar de su moto y junto a su compañera fueron trasladados a la Comisaría de nuestra ciudad.
De todos modos, fue esposado rápidamente, situación a la que llamativamente no opuso ninguna clase de resistencia. El operativo llamó la atención ya que a simple vista se pudo saber que no se trataba de personal de la ciudad. Después se certificó que los tres policías provenientes de la DDI San Isidro venían efectuando un trabajo de inteligencia durante los días previos, y justamente aquella jorndada venían siguiendo los pasos del sujeto.
Es más, pudieron establecer que la misma moto en la que se movilizaba cuando fue capturado, había sido utilizada en varias ocasiones para interceptar a sus víctimas.