¿Recuerdan Uds. cuando éramos chicos el cuento de la “buena pipa “?. Esto se repite con el caso de SADIV. Es lamentable que alguien de esta sociedad que está trabajando tan bien en nuestra ciudad, que es una de las entidades que más ha crecido en los últimos años, con presupuestos millonarios, no se maneje con la altura y diplomacia que exige su nivel. El artículo de referencia no refleja la verdad, y lamentablemente tengo que volver a repetir la misma historia. Esta vez comenzaré desde el principio: Les alquilé mi casa sobre la barranca, con uno de los paisajes más bonitos de San Pedro. En ese lugar fundaron el Centro de Día y ahí comenzó su meteórico ascenso. Al comienzo, hasta les rebajé el alquiler para ayudarlos, renovándoles el contrato cuantas veces me lo pidieron, con verdaderas batallas sobre el precio. El problema se origina con el proyecto de la avenida costanera. Sin consultarme, como lo indicaba el contrato de locación, autorizaron a la Municipalidad a levantar el alambre perimetral, demoliéndose el mirador y la pileta que estaban en la parte fiscal. Esta zona estaba perfectamente delimitada en un plano que habíamos hecho dibujar. Me encontraba ausente del país cuando recibí una carta documento intimándome en un plazo de 48 horas a rebajarles el alquiler por la falta del mirador y la pileta . Desde ese momento decidieron no pagar más el alquiler durante 6 meses. El contrato de locación vencía el día 30 de septiembre de 2005, y a pesar de tener otra oferta más interesante resolví darles la ampliación del contrato por l80 días con el mismo alquiler accediendo a su pedido. A su vencimiento les ofrecí que si lo deseaban, podían quedarse hasta terminar el proyecto de Lucio Mansilla. Faltan a la verdad cuando manifiestan que algunas situaciones inesperadas apuraron los planes. Lo que pretendían era ahorrarse el alquiler. Yo me pregunto: ¿Cuál es la verdad de todo?, ¿Porqué la continua agresión hacia mi persona?. ¿Tendrá algo que ver AFES?… ¿Será una cortina de humo para tapar los destrozos que dejaron en la propiedad de Joaquín V. González, donde alquilaban?. Lamentaré mi ausencia.
[i]Claudio Rodríguez – L.E. 4.657.903[/i]
