Cómo afecta la crisis a los clubes: Medidas para resistir y no caer
La situación económica afecta a diferentes sectores de la sociedad y las instituciones deportivas no están ajenas a ello, desde las más grandes a las más pequeñas en la ciudad o las localidades. La Opinión se focalizó en la actualidad de algunas que, en voz de sus dirigentes, detallaron las políticas que adoptaron para soportar el embate.
La crisis económica que atraviesa Argentina no es ajena a los clubes sean grandes, medianos o chicos de San Pedro o sus localidades. La Opinión consultó a dirigentes de varios de ellos para saber qué medidas tomaron para afrontar la situación y sostener sus relevantes actividades para la sociedad. En algunos todavía no es apremiante y tienen resto para afrontar el futuro por el buen trabajo realizado en el pasado. A otros la realidad los persigue y obliga a redoblar esfuerzos.
Mitre compitió en el inicio del año en el Torneo Regional con un plantel rentado y afronta la construcción de su cancha de fútbol de once jugadores. Sin embargo, no todo es patear una pelota en el Rojo, el que más creció en la última década, porque tiene una gran estructura que mantener. “La situación es similar a la de cualquier familia: los costos de luz, gas, teléfono e insumos aumentaron de manera desmedida y generan un inconveniente a la hora del funcionamiento normal de la institución”, indicó su presidente, Germán Codó, quien dejó en claro que “no se puede aumentar la cuota en la misma proporción para cubrir esa realidad” porque sus afiliados “pasan por la misma situación en su vida personal”.
El objetivo de la entidad que tiene su predio en Caseros y Rómulo Naón es en 2019 “mantener la cantidad de socios y el nivel de las actividades” además de agregar otras para “emparejar la pérdida normal de socios cuando termina el verano”. “Sabemos que va a ser un año muy difícil pero apostamos que con el apoyo de los socios y la colaboración de empleados, profesores, tercerizados y directivos superemos el momento de la mejor manera posible”, cerró Codó.
América se adelantó a la actualidad e instaló hace dos años, cuando aumentó la luz, lámparas led con el objetivo de aminorar el consumo. Sin embargo, también debió implementar otras políticas que describió su máxima autoridad, Sergio Bargues: “Aumentamos la cuota a los socios deportivos porque son los que más usan el club.No tenemos tantos problemas con las demás cosas, lo único que arrancamos una obra grande en el fondo del gimnasio con vestuarios y nos quedamos en las paredes y el techo”. Y, con sinceridad, cerró: “No estamos tan complicados con la crisis porque no tenemos demasiados gastos más allá de la luz”.
Los Andes, en voz de su presidente, Mario Morosini, dejó en claro que “de los clubes” locales es “uno de los mejorcitos” si tiene en cuenta “los problemas” que “escucha” tienen otros pares. “El tesorero, Miguel Naya, le dedica mucho tiempo y administra bien, no se va plata de más a ningún lado”, aseguró. Pero, más allá de su situación, la institución de Crucero General Belgrano también adoptó medidas porque no contrató “más personal” a pesar de que creció en cantidad de socios; instaló luces led y alquila tres veces por semanas sus canchas de fútbol infantil y mayor. Al mismo tiempo intentan afiliar a más sampedrinos y “mantener la cuota” para que no se le vayan “en invierno” que es su “parte más crítica”.
Banfield vive día a día y, tal como manifestó su presidente, Diego Obrador, lo que más les exige es el fútbol, sobre todo cuando es local en la LDS y debe abonar árbitros y seguridad. “Dependemos de cuánto gente va a la cancha y cómo anda la cantina”, explicó al mismo tiempo en que contó que su único ingreso genuino son las polladas. Como muchos de los chicos de la entidad no poseen recursos económicos para comprarse botines, la propia Comisión Directiva “busca presupuestos” para poder ayudarlos y facilitárselos.
El referente de Pescadores, Pablo Vlaeminck, dejó en claro que la situación del Azulgrana no es buena y mucho de ello se debió a los pocos turistas que visitaron San Pedro en la temporada de verano y, por consiguiente, su camping no funcionó como es habitual. Además, hace alrededor de un mes pararon todas las obras y es probable que aumenten el arancel para igualar los ingresos con los gastos. También, explicó que hay “mucho retraso” en el pago de cuotas y esperan que en mayo se desafilien más personas porque “hay morosidad”.
Con las obras que realizó recientemente como el cerramiento de la cancha de fútbol de mayores y la restauración del gimnasio Eduardo Romairone, Paraná crece en medio de una situación económica hostil. Crece porque, a pesar de que sacó del recinto cubierto la cancha de fútbol 5, sumó más actividades y, en consecuencia, muchos socios (a fines de 2018 tenía alrededor de 900 y hoy 1200). En contrapartida, el próximo mes la cuota aumentará porque también lo hicieron los sueldos de los seis empleados.
Por último, Náutico también acarrea secuelas del momento, tal como sostuvo su tesorero, Esteban Greco: “En marzo aumentó el nivel de morosidad, si bien el socio responde no lo hace como meses anteriores. Llegan pedidos de salvedades de cuotas, lo cual es imposible”. También, recalcó que la situación “afecta a todo el club” y que en enero se desafiliaron cincuenta personas. Sobre las medidas que tomaron y llevan adelante explicó que están “trabajando para reducir gastos” en “presupuestos y reducción de tareas”: “No hay horas extras y se bajó el nivel de francos compensados. El club tiene muchos gastos fijos, los salariales son los más gruesos y lo que se lleva mas parte de la recaudación. El resto se va en deporte e infraestructura”.
La crisis llegó más rápido a los pueblos
Los clubes de las localidades viven, desde antaño y sin tener en cuenta la crisis económica actual, una realidad totalmente diferente a los de San Pedro por un sinfín de causas propias del contexto en el que están ubicados y la sociedad que los rodea. Incluso, sus dirigentes y profesores trabajan ad honorem, “por amor a la camiseta” y hasta en muchas ocasiones solventado desde sus bolsillos gastos que la entidad no puede afrontar como tal.
Deportivamente, Gobernador Castro se refugia en Castro F.C. y Agricultores que es el que más actividades reúne y ofrece a sus 300 socios y la comunidad. Sin embargo, su situación es muy complicada y los dirigentes hacen malabares para no caer, tal como explicó la máxima autoridad de la Comisión Directiva, Gerardo De Vincenzi: “Estamos sobreviviendo no sé cómo. Jugar en la B nos perjudica porque casi todos los rivales no llevan mucha gente a la cancha y si nosotros no hacemos buena campaña tampoco nos van a acompañar”. Al mismo tiempo, detalló los gastos que tienen cuando son locales y el costo de los viajes cuando son visitantes teniendo en cuenta que todos los que trabajan en la entidad, a excepción de algunos casos, lo hacen ad honorem y “por amor”. Sobre los métodos para recaudar dinero, recalcó tienen a la venta una rifa aunque como el pueblo no tiene muchos habitantes que también afrontan la crisis y son muchas las instituciones que ofrecen lo mismo, es “muy difícil venderla”.
En el Oeste de San Pedro, Central Córdoba resiste y la da vida a Santa Lucía. “La crisis nos está afectando muchísimo, se no hace complicado el pago de la luz y diferentes servicios”, aseguró en el inicio de su discurso Enio Emmanuel Llovera, presidente del Lobo. También, explicó que no aumentaron la cuota social y que sigue en “70 pesos”, más barata que “un atado de cigarrillos” porque si la incrementan “hay mucha gente que no puede pagarla”. Y añadió: “Es difícil acá porque en la localidad no tenemos fuentes de laburo. Queremos incluir y no excluir. Las actividades que tenemos las sostenemos con rifas y otras cosas porque el fútbol, hockey, patín y el gimnasio, demandan”. “Esto nos afecta a todos, pensamos en los chicos y un chico en el club es un chico menos en la calle. Vamos a seguir luchando”, concluyó.
Por último, Río Tala es la localidad que más clubes alberga. Quien menos sufre es Independiente que se dedica exclusivamente al fútbol infantil, una actividad que por la cantidad de público que mueve cada fin de semana y los pocos gastos que conlleva abrir la cancha para ser local son fundamentales para que la caja cierre. Sobre la situación del Verde, Adrián Macenet señaló: “Medidas profundas no tomamos, venimos trabajando de la misma manera con un grupo de colaboradores importante. No estamos preparados para afrontar obras de magnitud pero el día a día venimos zafando bien con las entradas y la cantina”.
Las Palmeras ofrece fútbol juvenil y mayor y su status es totalmente distinto más allá de que se dio el lujo de competir en el Torneo de Clubes. “Los viajes del Torneo de Clubes los hicimos todos en autos o le damos unos pesos a los chicos para la nafta”, aseveró Mauricio Preiti, presidente del Albiceleste que está “cada vez más complicado”. Por último, detalló: “Tenemos alrededor de treinta socios en total que pagan 50 pesos por mes. Sale todo del bolsillo nuestro el resto y eso que nuestros técnicos no cobran ninguno y ponen plata ellos para viajar. Nosotros estamos en una situación intermedia, hay otros que deben alquilar cancha y no sé cómo hacen”.