#ClubesEnCuarentena La Esperanza: “Estamos mal porque tenemos todo cerrado”, sostuvo Alberto Noat
El presidente del Verde resumió en diálogo con La Opinión la situación en la que se encuentra el club teniendo en cuenta que desde que comenzó el aislamiento social preventivo y obligatorio está cerrado y sin actividad alguna a pesar de que se intentó poner en funcionamiento la cancha de pádel. Mientras tanto, sin shows y rifa, con lo que se percibe de la cuota social les alcanza para afrontar gastos ordinarios.
"Estamos mal porque tenemos todo cerrado, ni nos podemos reunir", sintetizó a La Opinión el presidente de La Esperanza, Alberto Noat, sobre la situación del club que tiene sus dos sedes, la social de avenida Sarmiento y Juan B. Justo y el Polideportivo Pablo Noat sobre calle Benito Urraco, cerradas por la cuarentena para evitar la propagación del coronavirus.
"Desde que empezó esto, estamos cerrado. Estamos como el país, mal; no tenemos actividades ni nada", añadió la máxima autoridad quien, también, contó que desde el club se solicitó poder hacer una "pollada" para ayudar a un "comedor" y reabrir la "cancha de pádel" porque consideran que por sus características el deporte no es riesgoso pero no recibieron la aprobación de la "Municipalidad".
En lo económica, la entidad no recibió hasta el momento ninguna ayuda del gobierno nacional y se sostiene con la cuota que abonan sus alrededor de 100 socios aunque la cobrabilidad, por la crisis económica, bajó considerablemente, tal indicó Noat: "No tenemos ingresos de casi nada porque hay pocos socios, no pagan tanto y la cobrabilidad bajó. Con eso alcanza para pagar la luz y hacer mantenimiento pero no podemos hacer inversión de nada".
Por último, siempre por la pandemia como causa, La Esperanza no lleva adelante sus tradicionales shows y se desconoce cuándo podrá reactivarlos al igual que su rifa anual la cual empezó en febrero y la cobranza quedó en stand by.
Una de las acciones solidarias que llevó a cabo la entidad en la cuarentena fue cuando el plantel de primera división cocinó un guiso en el Merendero de Raquel para alrededor de cien personas. La iniciativa la cumplieron jugadores, el cuerpo técnico comandado por Gabriel Guereta y dirigentes.