A título personal, quisiera responderle al Intendente Guacone sobre su deseo de llegar a un acuerdo con los compañeros de Unidos y Organizados. No formo parte de esa agrupación, pero conozco y dialogo con frecuencia con muchos de sus integrantes. Algunos, viejos compañeros de ruta, de otros carnavales. La mayoría, gente joven o muy joven, con la que me siento en sintonía fina. Y sé que lo que voy a decirle expresa el pensamiento y el sentimiento de muchísimos de ellos. No sé si de la totalidad, pero sí de la mayoría.
En primer lugar, Sr. Guacone, son militantes y no ñoquis. Militan en ese espacio por convicciones y no por conveniencias. Pertenecen a diferentes agrupaciones de base que se han ido formando en todo el territorio nacional por quienes descubrieron un proyecto de país para todos. Conforman ese espacio algunos viejos militantes que, descreídos de la política de los últimos 30 años, consiguieron recuperar su identidad peronista y rejuvenecieron en esta primavera, recuperando las viejas banderas de lucha. Pero en su mayoría, son gente joven que, a partir de Néstor, recuperó el sentido noble de la política, como manera de servir a los otros, trabajando al servicio de la comunidad. Conocieron lo perverso de las corporaciones, y resolvieron organizarse para superar una estructura partidaria obsoleta, en manos de caudillos secundarios y sus característicos “punteros”. Sin caer en prácticas indignantes que gente “nueva” llegada a la política, como Ud. Sr. Intendente, aprendió muy bien, asimilando las lecciones de los viejos lobos de mar, radicales o peronistas. Pero siempre, lobos de mar. Unos peores que los otros, pero todos verdadera negación de la política y hermosos ejemplos de politiquería. Cuando no, de corrupción.
En segundo lugar, no se venden por puestos. Hay muchísimas razones del proceder en el municipio que les impedirían aceptar un cargo, sin dejar de lado la ética y sus convicciones. La falta de transparencia, el descontrol en el manejo de los dineros públicos, y un abuso de la buena fe de la gente, entre otros. No adelanta declamar buena voluntad o “subirse” encima de las obras encaradas por el Gobierno Nacional en la ciudad. La falta de calidad en las relaciones institucionales con el H.C.D. es algo inconcebible en una democracia.
En tercer lugar, justamente por provenir de diferentes agrupaciones, y de diferentes orígenes ideológicos, practican el diálogo y la discusión como forma de construir una verdadera democracia interna. En su espacio, son simplemente Militantes. Y si hay compañeros que han llegado a la función pública, allí son militantes como todos los otros. Porque contrariamente a lo que se está acostumbrado, no existe “bajada de línea”, en cuanto Unidos y Organizados. Discuten en asambleas donde todos los participantes tienen voz y voto. ¿Sabe por qué, Guacone? Porque este Gobierno devolvió a los argentinos el significado de la palabra dignidad. Y esa dignidad los lleva a la convicción de que nunca deben ser instrumentos de la ambición de nadie. Algo que los ñoquis o punteros no pueden decir.
Por último, decidieron ir por fuera de las estructuras del PJ, lo que me pareció brillante. Porque los “aparatos” dominan, y son considerados como “propiedad” particular. Si hasta escuché decir a Monfasani “si quieren apropiarse del PJ, tendrán que…”. Lo traicionó el inconsciente, pero convengamos que el término no resiste al menor análisis ético. Como tampoco fue ético, en la última campaña, pelearse Ud. y Monfasani para “lucirse” con la entrega de los conversores digitales, en una falta de respeto para con la gente. Manía de viejos politiqueros que le hacen “favores” a la gente, para contar después con su voto. Las políticas de este Gobierno le devolvieron a la gente algo a lo que tenían derecho y, especialmente, su dignidad.
Por eso los muchachos decidieron ir solos, aunque supieran que era (y es) muy difícil superar prácticas que deberían estar superadas pero no lo están. Seguirán apoyando al Gobierno Nacional, sin preocuparse si Uds. lo apoyan de corazón o por conveniencia. Nuestros militantes (y entre ellos me incluyo, aunque esté lejos) ostentan la misma coherencia de nuestra Jefa Cristina, “la Terca”. Si la autenticidad de nuestras actitudes se basara en la coherencia de las mismas, hay muchísimos actores que son más falsos que billete de tres pesos. Ud. mismo, Sr. Guacone. ¿Dónde estaba en el 2008? Su mentor y creador, el “Marito” que vuelve. ¿Será que va a explicar a los sampedrinos por qué se fue, priorizando su carrera política a su compromiso con la gente de su ciudad? Su exsocio el Turco, que era o no era, ¿será que va a explicar el millón y poco que recibió para una ONG conformada por parientes y amigos? Todos ejemplos del más puro camaleonismo (término inventado, aclaro). Cómo lo es la conformación de su lista, que escuché por la radio. Un rejuntado de camaleones, que pasaron de un bando para otro. Uno viene de los radicales (nada contra) el otro es actualmente concejal de De Narváez. ¿Es posible toda esa ensalada de posturas, sin dejar de lado la ética y los principios?
Por todos esos motivos, está más que claro que nuestra militancia no tiene la mínima condición de acordar con Uds. Y si viniese algún funcionario de algún rango del orden que sea (lo que no creo) a querer convencerlos, yo les aconsejaría que le recuerden que Néstor Kirchner no dejó sus convicciones en las puertas de la Casa Rosada. Y Cristina se aguanta (con los ovarios que tiene) la cantidad asquerosa de insultos y boludeces que dicen de ella, justamente aquellos que realmente no tienen el mínimo equilibrio.
EDUARDO JUAN FLORES
DNI 4.685.785 Militante de la Patria Grande y simpatizante de Unidos y Organizados.
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